El movimiento turístico por la Semana Santa se encamina a marcar un récord histórico. Y el furor por los viajes de larga distancia así lo demuestra: los pasajes para los principales destinos se agotaron un mes antes del inicio de las mini-vacaciones de otoño. Las empresas de transporte debieron sumar servicios adicionales para complacer la demanda de aquellos que pueden escaparse cuatro o cinco días para descansar. Pero en la euforia por vender tickets, una docena de compañías de micros cometieron irregularidades y deberán cancelar una multa total de 5 millones de pesos.
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El encargado de anunciar la sanción fue el responsable de controlar al sector, Juan Pablo Schiavi. El secretario de Transporte informó que en lugar de cobrar la muta en efectivo y por ventanilla, se dispuso reducir subsidios a esas empresas que cometieron faltas graves en el cobro de pasajes.
"Se han evidenciado incumplimientos en unas doce empresas a las cuales las multas se les aplicará por vía de recorte de subsidios", detalló el funcionario en un operativo realizado en la terminal de ómnibus de Retiro.
El secretario explicó que anteriormente esas irregularidades, "a las empresas le significaban 1.000 pesos de multa, por eso hemos -en la última semana- establecido penalidades por cinco millones de pesos sobre líneas de colectivos que habían alterado los valores basadas en recortes de subsidios, lo que más duele".
Durante el control de la venta de pasajes, Schiavi constató violaciones de la banda tarifaria establecida por el organismo a su cargo. La Base Tarifaria de Aplicación (BTA) establece una reducción de la diferencia entre el precio máximo y el mínimo al 25%, por lo que las empresas pueden definir valores hasta un 10% de la tarifa media o un 15% por debajo.
Antes, la diferencia en la banda tarifaria era del 100% para un mismo trayecto. Esa amplitud permitía fijar precios altos en los recorridos en donde no había competencia y otro más económico en los que existe una variedad de oferta.
Un relevamiento de la Secretaría de Turismo de la Nación realizado la semana pasada indica que en la ciudad entrerriana de Gualeguaychú las reservas ya alcanzan el 100%, mientras que en la costa atlántica, Pinamar tiene el 67% de sus plazas reservadas y la ciudad cordobesa de Villa General Belgrano, el 75%.
Fuentes de la Dirección de Turismo de la provincia de Buenos Aires informaron que en la localidad de Villa Gesell tiene un 70% de reservas, Monte Hermoso tendrá un 80% de sus plazas ocupadas y Chascomús también posee el mismo porcentaje, pero en cabañas. En tanto, la localidad de San Nicolás tiene colmada su capacidad hotelera, mientras que en Tandil el alojamiento en cabañas llegaba al 95% y en hoteles al 75%.
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