Lo más razonable sería dividir la rueda en dos o a lo sumo en tres partes. En primer término, los diez minutos posteriores al arranque durante los cuales el promedio industrial trepó 0,57%, reflejando por un lado el preacuerdo que alcanzó General Motors con los gremios (el sector automotor ganaba en ese entonces casi 5%), la suba del petróleo (trepaba 1,3%) y el anuncio de la recompra masiva de acciones por parte de Chevron.
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Después podríamos hablar de un período que se extendió durante las siguientes cinco horas en las que primero fueron la debilidad del sector financiero y la fortaleza en las empresas cuyas ganancias provienen en parte del exterior (Coca-Cola, IBM, Alcoa, McDonald's) las que establecieron una especie de paridad (el anuncio de que las órdenes para bienes de capital habían caído mucho más que lo esperado no repercutió prácticamente en nada).
Un poco más tarde, esta tarea le correspondió al informe de los inventarios de petróleo, que hicieron retroceder al crudo a u$s 78,44 por barril (al final rebotó -lo mismo que el sector-y cerró arriba en u$s 80,72), llevando tras de sí 2% abajo a las energéticas y a los papeles financieros que comenzaron a ganar terreno apenas resurgió el clásico rumor de que "los chinos" comprarían Bear Stearns (el "palazo" que le pegó la gente de Goldman a Merrill Lynch advirtiendo sobre la caída en sus ganancias atemperó el entusiasmo por el sector). Cuando, finalmente, "The New York Times" confirmó que "Bear" realmente estaría por vender al menos 20% de su capital, pero no a los chinos, sino más posiblemente a Warren Buffet, el sector financiero salió disparado 1% arriba y entramos en lo que podríamos llamar la tercera fase de la jornada, cuando el Dow alcanzó a subir 1% media hora antes del cierre. A partir de ahí y hasta que sonó la chicharra final, la consabida "toma de ganancias" (o si se quiere una revaluación de la realidad, en parte por la "marcha atrás" de los compradores de SLM Corp.) derivó en que los precios cedieran algo de lo ganado de manera que el marcador de las Blue Chips finalizó el día en 13.878,15 puntos, reduciendo su mejora a 0,72%. Mejor, pero todavía no bien del todo.
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