Atanor cerró dos plantas y se enfocará en el negocio de los agroquímicos

Su nueva estrategia es consolidarse en el segmento de la protección de cultivos en el que prevé invertir u$s70 millones en los próximos cinco años.

Comuncación oficial. La firma se comprometió a abonar las indemnizaciones correspondientes.

La firma agroquímica Atanor anunció ayer el cierre de dos de sus plantas de producción, ubicadas en las localidades bonaerenses de Baradero y Munro. La decisión se encuadra dentro de su nueva estrategia de negocios, en la que abandona la producción de acetatos y alcoholes para enfocarse en el negocio de la protección de cultivos.

Según detallaron desde la compañía el cierre de los dos establecimientos trajo aparejado el despido de 136 trabajadores que recibirán la indemnización correspondiente, tal como lo indica la ley laboral.

En paralelo, Atanor dio a conocer un plan de inversión para seguir creciendo en el negocio de los agroquímicos, con el que planea desembolsar u$s70millones en los próximos cinco años.

"La decisión fue del grupo Albaugh -dueño de Atanor- ya que vislumbró una posibilidad de crecimiento concreta en el rubro de los agroquímicos en la Argentina y a nivel mundial. Por supuesto que lamentamos los despidos y es una situación penosa para la firma pero también debemos seguir trabajando por las otras 1.700 personas que emplea el grupo en la Argentina", indicó Agustín Herrera director de Asuntos Legales y Corporativos de la compañía.

Ahora los esfuerzos se concentrarán en sus plantas de formulación y síntesis de productos para la protección de cultivos, ubicadas en San Nicolás y Pilar, en la provincia de Buenos Aires y Río Tercero, en la provincia de Córdoba.

Dentro de este esquema de priorizar el segmento de los agroquímicos, en diciembre del año pasado Atanor vendió el ingenio azucarero Marapa y está en tratativas para desprenderse del ingenio Concepción, ambos ubicados en la provincia de Tucumán.

"En una primera instancia también iniciamos las negociaciones para vender las dos plantas dedicas a la producción de productos petroquímicos pero lamentablemente no encontramos interesados. A su vez, estamos avanzando con la venta de nuestro negocio dedicado a la extracción de sal, contamos con una mina ubicada en la provincia de La Pampa que pronto pasarría a manos de un nuevo grupo inversor", adelantó Herrera.

Hoy la fortaleza de Atanor en el segmento de los agroquímicos está de la mano de los herbicidas donde compite en el top 5 con firmas como Monsanto, Syngenta, Bayer y Dow y con este nuevo plan de negocios aspira a ubicarse en 2021 en el top 3.

"Durante el año pasado el negocio de los productos para la protección de cultivos de Atanor creció alrededor del 8% respecto de 2015 y tenemos todavía mejores proyecciones para este 2017. Nuestros tres principales productos son el glifosato, la atrazina y el 2,4-D, todos herbicidas, por lo que ahora el foco está en crecer en producción y comercialización de fungicidas e insecticidas y no dudamos que lograremos una importante porción de mercado", detalló Herrera.

El año pasado, el segmento de los agroquímicos representó ingresos de u$s330 millones para Atanor y según Herrera se vienen muchos nuevos lanzamientos que no sólo incrementarán el porfolio de productos de la compañía sino también engrosarán su facturación: "El plan es muy ambicioso porque prevé introducir en el mercado argentino más de cinco nuevos productos por año, todos con tecnología de punta y siempre con la calidad que brinda Atanor y que los productores agropecuarios argentinos ya conocen. Queremos ser líderes en innovaciones y ventas".