4 de mayo 2009 - 00:00

Comedia termina mal: esposa de Berlusconi pidió el divorcio

- Entra en juego una fortuna de e 5.000 millones. - «Italia justifica a su emperador», dijo la mujer.

El casamiento de Verónica Lario y Silvio Berlusconi, en 1990, fue todo un suceso en Italia. La mujer meditaba el divorcio desde hace meses.
El casamiento de Verónica Lario y Silvio Berlusconi, en 1990, fue todo un suceso en Italia. La mujer meditaba el divorcio desde hace meses.
Roma - La sucesión de coqueteos con jóvenes bellas, galanterías por doquier, chistes y reconciliaciones vía cartas públicas llegó a su fin para Silvio Berlusconi. Verónica Lario, esposa del primer ministro italiano durante 19 años, pidió el divorcio. Il Cavaliere lamentará una ruptura sentimental que, además, derivará en una dura negociación por una fortuna estimada en 5.000 millones de euros.

«Es un asunto personal que me duele, que entra en la dimensión privada, y del cual me parece obligado no hablar», indicó Berlusconi luego de que la prensa italiana hiciera pública ayer la decisión de Lario, una ex actriz de 53 años, 19 menor que el premier y con quien estuvo en pareja casi tres décadas.

Tras una larga consulta con los subsecretarios de la Presidencia, Gianni Letta y Paolo Bonaiuti, para decidir qué estrategia seguir con los medios, Berlusconi se desplazó en helicóptero hasta la casa que el matrimonio tiene en Arcore, en las afueras de Milán. Silvio Berlusconi reside en un palacio del siglo XVII, edificado sobre un antiguo monasterio del siglo XII.

Lario confirmó ayer que va a pedir el divorcio tras las últimas actuaciones de su marido, como la inclusión de mujeres bellas en las listas de su partido para las elecciones europeas y la visita que hizo Berlusconi hace unos días en Nápoles a una joven de 18 años, que lo llamaba «papi». Il Cavaliere no concurrió a los mismos festejos de sus hijos, «aun habiendo sido invitado», dijo Lario la semana pasada.

La ex actriz eligió como abogada a «una persona de la que finalmente me puedo fiar», dijo. La mujer quiere evitar las discusiones, hacerlo rápido y ganar tiempo a un hombre «capaz de convocar a una rueda de prensa para decir que el que ha pedido el divorcio ha sido él».

«Quiero seguir adelante. Estoy más tranquila y convencida de que en este punto no es digno que yo me pare aquí», confesó.

También sabe que el camino que le espera «es duro», en referencia al reparto de bienes patrimoniales que se negociará durante el divorcio, que podría alcanzar los 5.000 millones de euros.

Sus hijos, Barbara, de 24 años, Eleonora de 22, que estudia en los Estados Unidos, y Luigi, de 20, que sigue los pasos empresariales de Berlusconi, le aseguraron que «no moverán un dedo contra su padre», pero agregaron: «Vos, mamá, hacé lo que te convenga».

A fines de abril estalló la polémica sobre la inclusión en las listas para las elecciones europeas del Pueblo de la Libertad (PDL) de mujeres del mundo del espectáculo. Verónica Lario respondió que la candidatura de las jóvenes en la lista del partido era una «desvergüenza» para «diversión del emperador» y que ofendía «la credibilidad de todas» las mujeres.

Dos días después, Berlusconi decidió retirar a la gran mayoría de las «bailarinas» que pensaba incluir en esas listas. «La señora se ha dejado engañar por los periódicos de la izquierda. Lo siento», dijo.

Para Lario, en Italia «hay una extraña alquimia» por la que se «permite y justifica todo a su emperador».

Berlusconi se enamoró perdidamente de Lario cuando estaba casado con Carla Elvira Dall'Oglio, y aquella interpretaba la comedia «El magnífico cornudo», de Fernand Cromelynk, en el teatro Manzoni, de Milán.

El magnate y la bella actriz, de mirada felina y larga cabellera negra, mantuvieron una historia de amor apasionada de la que nació en 1984 su primera hija, Barbara, que sacó a la luz la relación al ser apadrinada por Bettino Craxi, ex presidente de la República.

Una vez nacidos los otros dos hijos con Lario, la pareja decidió casarse en una ceremonia civil el 15 de diciembre de 1990 en el Palazzo Marino, que fue todo un acontecimiento social en Italia.

Berlusconi había contraído matrimonio en 1965 con Dall'Oglio, con quien tuvo dos hijos: Maria Elvira, conocida como Marina, de 43 años, y Pier Silvio «Dudi», de 41.

Agencias ANSA y EFE

Dejá tu comentario