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Córdoba se desmarca con suba a docentes de 31,6%
En Córdoba, la Unión de Educadores de la Provincia (UEPC) intenta arrancarle al mandatario y precandidato presidencial un básico de 9.000 pesos (hoy es de 6.000 pesos), de la mano de una recomposición en ese rubro del 50%.
"La propuesta de ellos, en principio, es repetir la pauta salarial del año pasado, pero nosotros hemos rechazado de plano esta oferta", aseguró ayer la secretaria adjunta de UEPC, Zulema Miretti.
En rigor, el Gobierno de De la Sota no concretó aún una oferta oficial en lo que fue el primer encuentro paritario, que tendrá un segundo capítulo en los próximos días, en fecha aún no definida.
Como en Córdoba, también avanzan las paritarias con los gremios docentes locales en buena parte del país, con el objetivo de asegurar un normal inicio de clases el próximo 2 de marzo, en la antesala de la catarata de elecciones nacionales y provinciales de este año.
Sin embargo, las definiciones de fondo en la mayor parte de los casos se dilatan, a la espera de que emanen pautas desde el round madre: la paritaria docente nacional, que arrancará la semana que viene y que sentará en una misma mesa al ministro de Educación, Alberto Sileoni, y a los cinco gremios con representación federal: CTERA, UDA, SADOP, AMET y CEA.
Tal como lo informó este diario, y en sintonía con los criterios que maneja la Casa Rosada, ministros de Economía de una decena de provincias coincidieron días atrás en que los aumentos deben tener un techo del 25%.
Por eso la estrategia cordobesa para negociar con los docentes locales complica esa pretensión porque eleva el piso de discusión en todo el país. En 2014, los aumentos provinciales promedio terminaron en el orden del 30,5%.
Uno de los asistentes a aquella cumbre de ministros en Buenos Aires fue el santafesino Ángel Sciara. Ayer, la ministra de Educación de esa provincia, Claudia Balagué, admitió que va a ser "difícil" llegar a la pretensión de los gremios locales de cosechar un salario mínimo de 9.000 pesos.
En esa línea, en Chubut, el Gobierno del justicialista Martín Buzzi ofertó una suba del 22% en al menos seis cuotas, que fue rechazada.
Aunque con matices según el caso, los gremios del interior exigen aumentos que no bajan del 30%.
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