4 de mayo 2010 - 00:00

Escalada de subas en servicios del interior

En otro golpe al bolsillo de los consumidores del interior del país, las provincias autorizaron en los últimos días una nueva oleada de incrementos de tarifas, con subas que hasta el momento oscilan entre el 5,5% y el 15% en materia de energía y que arañan el 40% en el caso del agua.

Los retoques se dan de la mano del aumento de los costos operativos denunciados por las empresas prestatarias de servicios, sobre todo a partir de las últimas recomposiciones salariales otorgadas en el sector. En algunos distritos, el anuncio de inminentes alzas ya deriva en movilizaciones de usuarios y en amenaza de apagones para amplificar el rechazo a la medida.

Veamos algunas postales que grafican la nueva ristra de cambios en las tarifas, que ya rigen o que están a punto de salir a la luz: 

  • En Tucumán, el Gobierno del justicialista José Alperovich convocó para el próximo lunes a una audiencia pública destinada a definir si será avalada la suba tarifaria en la electricidad solicitada por la Empresa Distribuidora de Energía de Tucumán (EDET), sobre la base del incremento en los costos operativos y que será aplicada a cerca de 400.000 usuarios de la provincia.

    La pretensión de aumento -que sería de entre el 6% y el 8%- generó fuerte malestar, que tomó la forma de movilizaciones y de apagones. El último incremento -del 4% promedio- fue de noviembre pasado. 

  • En San Juan, por su parte, el presidente del Ente Provincial Regulador de la Energía (EPRE), Jorge Rivera Prudencio, anunció días atrás un alza del 5,5% en la tarifa de la energía, retroactivo a marzo. 

  • En paralelo, en Santa Fe los usuarios provinciales reciben por estas horas la factura de luz con una suba del 6%, en el marco de un incremento hecho público por el Gobierno del socialista Hermes Binner en enero pasado, y que rige desde el 1 de marzo.

    A ello se suma, además, la recomposición de la tarifa de agua, en este caso de entre el 19% y el 39% para la mayoría -ese rango alcanzará a alrededor del 70% de los usuarios residenciales del distrito- y que será aplicada desde este mes. «El cuadro tarifario de la Empresa Provincial de la Energía está atrasado, pero el del servicio del agua lo está aún más, ya que se está cobrando 43 centavos lo que cuesta 1 peso producirse», argumentó, al anunciar los incrementos, el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio

  • También soplan vientos de cambios tarifarios en Córdoba, donde el Ente Regulador de los Servicios Públicos (ERSEP) autorizó días atrás a las cooperativas eléctricas del interior provincial a subir el 15% la tarifa que cobran por el servicio de provisión de energía.

    El alza -que alcanza a un tercio de la población cordobesa, en cerca de 300 localidades, abastecidas por 210 cooperativas- comenzará a regir con el cobro de los consumos de abril para el caso de todas las categorías de clientes, con excepción de los grandes usuarios.

    El retoque -reclamado por la Federación de Cooperativas Eléctricas y de Obras y Servicios de Córdoba, y por la Federación Argentina de Cooperativas Eléctricas- se suma al incremento del 12% (más un cargo fijo para obras del 3,8%) autorizado a fin del año pasado por el ERSEP a la Empresa Provincial de Energía. 

  • En sintonía, en Entre Ríos, el presidente de la Empresa de Energía de Entre Ríos (ENERSA), Juan Carlos Chagas, sostuvo que «es inminente» el anuncio de una suba en la tarifa eléctrica local.

    En medio de una audiencia pública concretada en marzo en la localidad de Villaguay, ENERSA pidió un incremento del 21,8%.

    «Aguardamos que el Ente Provincial Regulador de la Energía se expida al respecto, y para aquellos entrerrianos que no cuenten con posibilidades económicas estamos analizando ampliar la factura social», remarcó Chagas. 

  • Mientras tanto, en La Pampa, el Gobierno del peronista Oscar Jorge autorizó -vía la Administración Provincial de Energía- a las cooperativas a incrementar el 15% la tarifa eléctrica este año -de manera escalonada en abril, junio y setiembre-, con el objeto de financiar los incrementos salariales en el sector.
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