Fuerte caída en área de maíz

Se muestra la proyección de resultados para la zona Norte de Buenos Aires y Sur de Santa Fe, sobre la base de los precios proyectados a cosecha 2016 para trigo y granos gruesos. Se presentan las cifras para los cultivos realizados por administración en campo propio, y bajo la forma de arrendamiento en campos de terceros.

Ya está casi finalizada la siembra del maíz temprano en la zona. Falta sembrar una baja proporción de área que se destinará al maíz tardío, en el mes de noviembre. El denominador común es una caída fuerte en el área en vista del quebranto proyectado ante bajos precios y los elevados costos en dólares. La venta de semilla habría caído cerca de 40% respecto de la última campaña en híbridos de primera línea, a la vez que cayó en forma significativa el precio por bolsa. Aún con esta baja en el precio de la semilla de maíz, la inversión en costos directos (sin incluir el costo de cosecha) es 150 US$/ha más alta que lo que se requiere para sembrar una hectárea de soja de primera.

Los valores de arriendo bajaron fuerte, pero los costos fijos o de estructura del productor que siembra en campo propio aumentaron; de esta forma, es más grave el quebranto proyectado para siembras en campo propio. Para los precios y costos que se muestran en el cuadro es necesario obtener un mayor rinde para cubrir los costos totales en campo propio que en campo arrendado.

Para siembras en campo propio por administración, los rindes de indiferencia necesarios para cubrir el total de costos son de 48 qq/ha en trigo, de 25 qq/ha en soja de 2ª sembrada sobre trigo, de 97 qq/ha en maíz y de 40 qq/ha en soja de 1ª.

Para siembras en campo arrendado el rinde de indiferencia necesario para cubrir costos totales es de 47 qq/ha en trigo, 24 qq/ha en soja de 2ª, 90 qq/ha en maíz, y 39 qq/ha en soja de 1ª.

Para bajar los costos el productor tiene algunas alternativas como sembrar soja con semilla de propia producción, negociar las tarifas de laboreos y cosecha, vender con flete directo a puerto (sin flete corto) e intentar cosechar sin humedad excedente el grano. Con estos ajustes el rinde de indiferencia podría bajar uno o dos quintales. De todas formas, los rindes de indiferencia son altos, y se necesitan condiciones climáticas buenas para obtenerlos.

Si el evento "Niño" pronosticado genera buenas lluvias, la evolución de los cultivos será buena. El clima es un factor importante, pero no depende del productor y no es el único necesario para escapar del quebranto. Las variables "locales" que deprimen el precio, como los derechos y los cupos de exportación deben ser eliminados para que la agricultura vuelva a ser viable.