Juez objeta cinco candidatas de Unión PRO en Buenos Aires

Manuel Blanco

El juez electoral bonaerense, Manuel Blanco, se convirtió nuevamente en uno de los protagonistas de la campaña electoral para los comicios legislativos del 28 de junio, al objetar cinco postulantes de las listas de PRO-PJ disidente, encabezada por Francisco de Narváez. El magistrado negó la oficialización de las candidatas Claudia Rucci, Silvia Majdalani, Natalia Gambaro, Silvia Lospennato y Ana María López, al señalar que no habían nacido en la provincia de Buenos Aires, ni cumplían con el requisito de dos años de residencia, y solicitar que aportaran más pruebas al juzgado para estudiar sus casos. La decisión del juez, que además pone en riesgo el cupo femenino de la lista opositora, fue denunciada por De Narváez como una «maniobra del oficialismo» y parte de «una persecución política» sobre su persona.

«Vamos a apelar esta decisión. Hemos presentado toda la argumentación para que esta impugnación no corra. Que esto va a llegar a la Corte, no tengo ninguna duda, pero no hay tiempo. Las boletas se tienen que imprimir el viernes. Están jugando con los tiempos de los procesos judiciales», señaló ayer el titular del PRO-PJ bonaerense, quien se mostró «indignado» por la definición de Blanco. De Narváez agregó que «las interpretaciones son ridículas, sesgadas, el juez pone bajo sospecha las facturas de los servicios domiciliarios, esta es una persecución sobre mí, sobre lo que nosotros representamos. Este es el kirchnerismo que se viene».

Las acusaciones del candidato opositor dispararon la respuesta de quienes prácticamente funcionan como los voceros del Gobierno: Florencio Randazzo y Aníbal Fernández salieron inmediatamente a respaldar a Blanco. El ministro del Interior calificó de una «irresponsabilidad absoluta» los dichos de De Narváez y aclaró que no había sido el oficialismo el que impugnó a las candidatas del PRO-PJ disidente. Randazzo además aprovechó el cruce para cargar contra el opositor y descalificó las denuncias de De Narváez al asegurar que «vienen de quien permanentemente viola las leyes». En este sentido, el estresado funcionario puntualizó que está prohibida «la emisión de avisos publicitarios antes de los 32 días de los comicios, pero De Narváez está en campaña hace seis meses. Está prohibido que un diputado sea dueño de un medio de comunicación, y es público que De Narváez es dueño del canal América; es él quien viola las leyes».

Por su parte, el ministro de Justicia justificó las medidas adoptadas por el magistrado y afirmó que las postulantes debían «cumplir con los requisitos que nuestra legislación exige». Experto en chicanas, Fernández disparó contra Rucci, cuarta en la lista opositora, y sostuvo que sentía «vergüenza ajena» por la hija del sindicalista asesinado. «Soy admirador de Rucci y siento un poquitito de vergüenza ajena de lo que el padre debe estar pensando en el cielo viendo a su hija al lado de De Narváez, Solá y Macri. Debe estar arrancándose los pelos con las dos manos», lanzó el kirchnerista.

La única postulante del PRO-PJ disidente que avaló Blanco fue la funcionaria macrista del Gobierno porteño Gladys González, tercera en la lista. De ese lugar para abajo, hubo una fuerte poda: el juez objetó a Rucci (en el cuarto puesto), Majdalani (séptima), Gambaro (décima), Lospennato (en el puesto 22) y López (en el puesto 29).

La hija del titular de la CGT asesinado en 1974, que llegó a la lista de diputados de Unión-PRO impulsada por la pata sindical de ese espacio, también salió ayer a criticar en duros términos los requerimientos de Blanco y aseguró que siempre había votado en la provincia de Buenos Aires. Agregó que la determinación del juez era «un hecho político», que asoció al peso de su apellido. «Con todo el dolor del alma tengo que decir que el apellido Rucci les trae mucho miedo, por eso creo que no es contra mí, sino en contra de lo que represento», subrayó Rucci.

Según informaron en el juzgado electoral de la provincia, Rucci nació en Capital Federal y registró domicilio en la provincia el 12 de marzo de 2008. En tanto, Majdalani -propuesta por Macri y actual diputada porteña- nació en la Ciudad y registró domicilio en el distrito bonaerense desde el 13 de noviembre de 2008. Gambaro, una abogada especialista en temas de seguridad y justicia y coordinadora de los equipos técnicos de De Narváez, también es porteña de nacimiento e inscribió domicilio en la provincia el 14 de noviembre pasado. En cuanto a Lospennato, fue subsecretaria de Promoción de Inversiones y Cooperación Internacional del Gobierno de Daniel Scioli hasta octubre pasado, es porteña y registró domicilio bonaerense por esa misma fecha.