30 de septiembre 2016 - 00:24

Lo que se dice en las mesas

• Nubarrones en el sistema financiero mundial. • El desfile de un CEO ante Congreso norteamericano. • El himno del blanqueo ya circula en las redes sociales. • Viajeros frecuentes a Montevideo por el "cash". • Los operadores, a clase para demostrar que son idóneos. • Recomendación para Netflix.

Lo que se dice en las mesas
Si fuera por la cantidad de eventos, seminarios, reuniones y flujo de información, podría decirse que se está ante un "boom" más que brotes verdes. Ayer, por ejemplo, sobraron los temas de conversación en las mesas. Son tiempos en los que operadores deben retomar estudios, desempolvar cartucheras y carpetas, dado que están obligados a rendir examen de idoneidad. por requisitos de la nueva ley de mercados. ¿Sirve para algo? Si uno observa lo que está pasando en EE.UU. y Europa con los bancos, se llega a la conclusión de que los problemas pasan en el sistema financiero por otro carril. Incluso podría decirse que las crisis las generan los que tienen exceso de idoneidad...En Alemania, el Commerzbank AG anunció ayer que reducía el 20% de su personal como parte de su estrategia para ganar credibilidad. Los hedge funds en paralelo están reduciendo a cero su participación en el Deutsche Bank, el epicentro de esta nueva tormenta en el sistema financiero internacional. Su CEO John Cryan descartó que la entidad necesite un rescate del Gobierno alemán, frase que, como siempre sucede, termina generando la sensación de que necesita un rescate. Ayer el Deutsche Bank perdió más de 6% y nadie se anima a ponerle piso a su retroceso. Es que en las mesas locales está fresca la herida que dejó el Citigroup en su derrumbe en la crisis de 2008. Parecía barata la acción a u$s20 dado que venía de más de u$s50. Terminó valiendo menos de un dólar. No son tiempos políticos para avalar rescates de bancos en el mundo. Merkel, antes que hacerlo, esperará a que no haya otro remedio y que los accionistas pierdan lo máximo posible por los pecados cometidos.

En EE.UU., la saga bancaria tuvo su capítulo con el Wells Fargo. Se trata de la entidad que la Embajada de EE.UU. en la Argentina impulsaba para que se quede con el segmento minorista del Citibank. Los propios directivos del Wells Fargo descartaron luego esa operación. Ayer el CEO de esa firma John Stumpf desfiló por la Cámara baja del Congreso norteamericano. El escándalo estalló cuando se conoció que Wells Fargo despidió a 5.300 empleados tras una investigación por la apertura de miles de cuentas bancarias falsas, sin la solicitud de los clientes. Lo venían haciendo desde 2011. Habrían sido hasta 2 millones de cuentas. Las palabras de Stumpf pudieron ser seguidas por Bloomberg TV en la plaza local. Poco feliz estuvo, por ejemplo, cuando señaló que ese comportamiento erróneo "apenas representa el 1 % de nuestros empleados" y apuntó "al buen trabajo financiero de la entidad en su conjunto". Por lo menos renunció al bonus de 41 millones de dólares entre salario, bonos por resultados y acciones para este año.

Los operadores se repartieron entre infinidad de eventos. Muchos están en el IAEF (Instituo Argentino de Ejecutivos de Finanzas) en Córdoba, una cumbre que cada vez gana más adeptos, al punto tal que hasta van ejecutivos poco relacionados con las finanzas. Ayer la Fundación FIEL nuevamente se convirtió en el epicentro pero económico con su clásico encuentro anual (ver páginas 2 y 3). Y también se dio la conferencia anual de Moody´s en el Four Seasons. El principal invitado fue el secretario de Finanzas, Luis Caputo. A sala llena escuchaban atentos operadores locales del Macro, Francés, Galicia, Puente e ICBC. También directivos de Tavelli, Proficio y Balanz. Abogados del sistema financiero discutiendo sobre las últimas provincias en emitir deuda que -se sabe- se usará para el pago de gastos corrientes. Sería la versión financiera del "siga, siga..." del recordado árbitro Francisco Lamolina. Se sabe que de perdurar, el fin de la historia es el salvataje de la Nación a las provincias endeudadas. En el break del evento se comentaba que se cumplen 240 años de la publicación del famoso libro de Adam Smith "La Riqueza de las Naciones". Varios encuentros están programados, uno de ellos en la UCEMA, el viernes próximo, con motivo de ese aniversario.

El miércoles a la noche el MAE tuvo su celebración en el cocktail de agentes. Fue en Nivel 3, en San Telmo. Los organizadores se lamentaban que la terraza estaba vacía porque el clima no acompañó como en días previos. De todas maneras las mozos tras las barras de alcohol no descansaron. En la entrada recepcionaba Irene Isola, representante del MAE. Se percibía inquietud con el blanqueo. Inversores minoristas apáticos con el blanqueo de cash que vence a fin de octubre. Más después de conocerse la noticia de que en España los que entraron en una amnistía fiscal años atrás son nuevamente perseguidos hoy por el fisco. Se comentaba que las luces de alerta de los economistas locales sobre los números fiscales rebotaron mucho más en la comunidad internacional ahora que los bancos de Nueva York incluyeron en sus informes estos temas. En los Iphone 7 que ya se comienzan a ver en este tipo de encuentros, un operador mostraba -y cantaba- el himno del blanqueo, con el mail recibido con la letra del mismo. Se titula "Cumbia del Sinceramiento: No me arrepiento de este error" y dice: "¡No me arrepiento de este error / y aunque me cueste un diego hoy / negrear es un milagro y yo negrié / como nunca jamás lo imaginé!...". La letra, sigue hasta el final, la escribió una gran profesional de impuestos a quien no le alcanzan las horas del día para atender a los arrepentidos. Otro homenaje a Gilda.

Hablando del blanqueo a medida que se van venciendo los plazos, se conocen distintas artimañas. Algunas rozando el absurdo. Un operador turístico comentaba ayer el insólito pedido de uno de sus clientes. Le había solicitado que le reservara pasajes aéreos de ida y vuelta a Montevideo para la primera quincena de octubre. Hasta ahí nada era llamativo. Lo curioso es que lo que demandaba eran siete vuelos de ida por la mañana y siete regresos por la tarde o noche en días hábiles para dos personas. Sospechoso. El régimen aduanero establece que hasta u$s10.000 por persona se pueden ingresar al país sin obligación de declarar. Es decir por más de $150.000. Un pasaje a la capital uruguaya de esas características vale unos $3.000 por Alas de Uruguay, la ex Pluna o $5.400 por Aerolíneas Argentinas. El costo, entonces, para ingresar esos dólares es de entre 2% y 3% (es cierto que habría que sumarle el gasto de una comida en el país vecino). Dos personas haciendo siete viajes entrarían, a ese costo, unos u$s140.000. Ingresar al país esos dólares vía la transferencia "blue" cuesta un 6% mínimo. Eventualmente puede haber otros que no quieran pagar nada y se arriesguen a cruzar el Rio de la Plata en lanchas o veleros...

Tremendo informe del "oso" sobre lo que sucede en mercados. Dice este ejecutivo de banca privada en su mail habitual de los jueves lo siguiente: "1) varios fondos de coberturas redujeron sus líneas de crédito al Deutsche Bank; por el año nuevo judío puede suceder que el mercado quiera estar fuera ante cualquier eventual anuncio el fin de semana o bien que los especuladores recorten sus posiciones para no quedar tan expuestos; se vienen horas de mucha volatilidad; 2) a seguir con atención lo que está ocurriendo en India donde surgen tensiones con su vecino Pakistan; 3) México tuvo que subir su tasa de corto plazo al 4.75% a contramano del mundo debido a que su moneda estuvo merodeando los 20 pesos por dólar; 4) los que sí están de fiesta son todos aquellos fondos que manejan información privilegiada y estuvieron comprando bonos venezolanos y que siguen empujándolos hacia arriba. Fecha clave, 6 y 14 de octubre para ver cuán exitoso fue el canje; 5) En Argentina sigue la fiesta, ahora vamos a emitir en pesos a 5 años y les van a facilitar la compra a los inversores foráneos para que sigan arriba de la bicicleta aprovechando tasas del 20% mientras la fiesta continua". Se despide. Recomienda "Billions", por Netflix, imperdible para los fanáticos de Wall Street.

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