Un empresario y su pareja fueron involucrados en una de las operaciones de tráfico internacional de armas más grandes hacia el Cono Sur desde Brasil. Los argentinos, identificados como Diego Hernán Dirisio y Julieta Nardi forman parte de una lista de 20 órdenes de captura que incluye a militares de alto rango en Paraguay.
Brasil: dos argentinos involucrados en un esquema de tráfico internacional de armas
Un empresario y su pareja serían parte de un esquema de tráfico de armas. Al menos 20 personas forman parte de lista de órdenes de detención.
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Dos argentinos sospechosos de ser parte de un esquema de tráfico de armas.
Ambos habrían sido parte de un esquema destinado a proveer de alto poder de fuego al crimen organizado en Brasil. Hasta el momento ya fueron detenidas 13 personas, mientras que los argentinos se encuentran prófugos. Según sostienen, en la última década lograron ingresar desde Europa más de 25.000 armas. Luego, quedaron en manos de poderosas organizaciones brasileñas.
Operación Dakovo
Diego Hernán Dirisio y Julieta Nardi quedaron expuestos luego de más de un año de investigación bajo la llamada "Operación Dakovo". La misma se enfocó en la desarticulación de un gran esquema de tráfico de armas que provenían de Paraguay y luego quedaban en manos de las organizaciones más peligrosas de Brasil.
Tal y como indica la investigación, la empresa International Auto Supply (IAS), de la cual es presidente Diego Hernán Dirisio, conseguía permisos de manera muy rápida a través del mayor rector del control de armas en Paraguay, la Dirección de Material Bélico (Dimabel).
Cómo funcionaba la empresa del argentino imputado
Con su conexión con Dimabel, Dirisio lograba importar armas desde Europa, específicamente provenientes de Croacia, Eslovenia y República Checa, además de que se le facilitaba las ventas de las mismas. Los investigadores explicaron que justificaban las transacciones simulando ventas de pocas armas a personas que no tenían capacidad financiera.
Además, revelaron que el armamento llevaba un número que se le colocaba antes de ser enviado para evitar el rastreo del mismo. Así, la empresa del argentino Diego Hernán Dirisio importó un total de 25.000 armas que tenía como destino Paraguay, pero fueron desviadas hacia Brasil.
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