5 de enero 2007 - 00:00
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Fuentes policiales informaron que el suboficial del Ejército retirado sufrió un disparo de un arma calibre 22 en la mejilla y debió ser internado -fuera de peligro- en el Hospital Militar de Palermo.
Una hora después, cuando tres delincuentes intentaron robarle el auto a un militar que circulaba en un Peugeot 405 por la esquina de la calle Basualdo y la avenida Emilio Castro.
Si bien el suboficial no estaba armado, se habría resistido supuestamente a que los delincuentes se lo llevaran, y como respuesta uno de los ladrones le disparó en la cara, de acuerdo con lo indicado.
La víctima fue trasladada de urgencia al Hospital Piñero y de allí al Hospital Militar, donde quedó internado fuera de peligro.
En otro episodio ocurrido ayer al menos cuatro delincuentes armados asaltaron la sucursal Almagro del BankBoston, aunque cuando escapaban con el dinero de dos cajas de atención al público uno de ellos fue detenido por la policía.
Fuentes policiales informaron que el episodio ocurrió poco antes del mediodía en la sede bancaria situada en Corrientes y Bulnes, donde irrumpieron cuatro asaltantes.
Dos de ellos ingresaron al salón de atención al público mientras que los otros dos quedaron en el sector donde funcionan los cajeros automáticos, uno de los cuales mostró un arma de fuego.
El jefe de la seccional novena de la Policía Federal, Héctor Lucca, dijo a la prensa que uno de los ladrones que estaba en el salón intimidó al vigilador privado y el segundo saltó la linea de caja con un arma en la mano y las saqueó.
El robo, que duró poco más de un minuto, quedó registrado en las cámaras de seguridad que tiene la sucursal y serán analizadas por los investigadores.
El hecho fue observado por un agente de la mencionada comisaría que estaba realizando el "servicio de prevencional bancarios" (de vigilancia) que no quiso ingresar al banco y esperó a que los delincuentes salieran.
Cuando salió la banda, el policía le dio la voz de alto pero los delincuentes comenzaron la fuga tomando distintos caminos, dos de los cuales quisieron subir a una camioneta que estaba estacionada sobre la calle Bulnes.
El policía logró detener a uno de ellos y el otro lo apuntó con un arma pero el policía le dio la voz de alto e hizo un disparo intimidatorio, ante lo cual el ladrón arrojó su arma y escapó.
El jefe policial manifestó que el banco debe hacer el arqueo correspondiente para poder determinar si el dinero secuestrado es la totalidad de lo robado.
Lucca dijo que la camioneta en que los ladrones quisieron escapar y el arma abandonada por otros de los ladrones, quedaron secuestradas y era peritada por los expertos en criminalísitca de la fuerza.
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