El aislamiento social preventivo y obligatorio debido al COVID-19 que se instaló en la Argentina a partir de marzo 2020 no solo obligó a adaptarse al trabajo remoto, sino que además sumó la incertidumbre de no saber cómo enfrentar este enemigo invisible y silencioso.
Uniendo Argentina y Escocia a través del arte y el whisky
La prolífica artista plástica argentina Gisela García Gleria convirtió en arte su pasión por el whisky, la bebida espirituosa de orígenes ancestrales.
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Ese punto de inflexión fue para la artista plástica y compositora porteña Gisela García Gleria el comienzo de una colaboración internacional con el consultor y ferviente estudioso del whisky escocés John Robertson, fundador y director de Messrs. Whisky & Co que ha dado como resultado una enorme producción que ya alcanza las 100 obras enfocadas exclusivamente al whisky. Esta colaboración no paró de crecer desde entonces, y continúa con interesantes proyectos que esperan el fin de la pandemia para concretarse en Escocia y en Buenos Aires.
Pasiones que se encuentran
Entusiasta del mundo del vino y apasionada por el estudio sobre el destilado estrella de Escocia, pocos meses antes de la cuarentena, Gisela había realizado en Buenos Aires una exposición individual de pinturas inspiradas en vinos argentinos y whiskies escoceses. A partir de notas de catas obtenidas de la degustación de los vinos, espumantes o whiskies, su inspiración surgía al ritmo de imágenes que su mente evocaba y que luego plasmaba en los lienzos.
Al comienzo de la pandemia se encontraba en la búsqueda de nuevos desafíos artísticos para seguir desarrollando con su arte la temática del whisky, ya que estaba decidida a seguir interpretando artísticamente el increíble mundo que “el agua de vida” ofrece a los sentidos en la suntuosidad de su espíritu, la complejidad de sus procesos y la riqueza de su historia. Entonces, cuando el mundo estaba completamente cerrado, las redes sociales abrieron el camino para empezar un prolífico intercambio de ideas entre la artista argentina y el consultor escocés.
De esas ideas surgieron desafíos artísticos que lograron mostrar la intimidad de las destilerías, sus historias, los maravillosos entornos naturales donde se emplazan, los procesos de producción, en definitiva, las distintas aristas del grandioso mundo del whisky. Uno de los retos más significativos fue pintar el retrato de Charles MacLean, una de las personalidades más importantes de la industria del whisky, en Escocia y en el mundo, que recientemente ha sido honrado como Miembro de la Orden del Imperio Británico en la lista de honores del cumpleaños de la Reina.
Las series
Sus pinturas dedicadas al whisky se agrupan en 6 series que abarcan diferentes temáticas. La primera es “Espíritu Libre”, el origen de la producción que nació en 2019, interpreta el espíritu de cada expresión como un paisaje o escena de la naturaleza.
Ya en 2020 y en colaboración con John desarrolló las demás series comenzando por “Destilerías”, que se concentra en los edificios y su entorno, en las distintas atmósferas que envuelven el proceso de creación del whisky, el terroir que transmite la bebida y que le da una personalidad única a cada expresión.
“El mundo del Whisky” muestra otro ángulo desde donde poder observar, apreciar y valorar la paleta de matices que se abre al adentrarse en el mágico y diverso mundo del whisky. En esta serie comenzó también su incursión en el uso del whisky como parte de la obra, usándolo como medium del acrílico en vez de agua, técnica que sigue desarrollando. Dentro de esta serie creó una versión original de la “Rueda de Aromas y Sabores para la cata de whisky”, otra notable obra de una estética muy personal surgida de los retos artísticos planteados por el consultor escocés.
Cerrando el 2020 comenzó la serie “Una historia de whisky” en la que recorre los hitos más importantes de la destilería Glenfiddich a través de 10 obras de una poesía elocuente. Todos los cuadros tienen un hilo conductor en el estilo de pintura, en las medidas del bastidor y en la técnica utilizada, que se caracteriza por un finishing de acrílico dorado mezclado con Single Malt Whisky Glenfiddich 12 años.
Ya en 2021 desarrolla dos series simultáneas, una de ellas, “Espíritu del mar” celebra la influencia marítima en los whiskies de Escocia y las competencias de remo patrocinadas por la marca de whisky Talisker, donde hombres y mujeres atraviesan 3000 millas en el Océano Atlántico para unir a remo La Gomera (segunda isla más pequeña de las islas Canarias, España) con Antigua y Barbuda (Isla del mar Caribe).
La otra serie actualmente en proceso, “Historia de The Macallan”, comprende cerca de 30 cuadros, que simbolizan los Seis Pilares que estructuran la filosofía de la destilería, planteando una visión artística sobre imágenes características de esta marca icónica y mundialmente reconocida.
Y ¿por qué pintar sobre el whisky?
El whisky, bebida espirituosa de orígenes ancestrales, acompañó la historia de Escocia desde sus comienzos desarrollando un arte único, propio e inigualable en su elaboración. Es una expresión de su cultura, un hijo de su increíble geografía, una parte importantísima de su sociedad que se ha expandido en el mundo entero, como embajador de una nación y como manifestación de su identidad.
Dicen que cada whisky cuenta una historia, y las buenas historias, como el arte, acercan a la gente. Gisela García Gleria demuestra con sus pinturas que la complejidad y la riqueza de esta bebida aporta un vasto espectro de emociones, atmósferas y paisajes, instantes que se convierten en imagen desplegando aromas, sabores, colores, texturas y tradiciones a través de la creatividad de la artista.
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