El candidato republicano Donald Trump competirá en las elecciones de EEUU para volver a la Casa Blanca. Vinculado al sector de bienes raíces, el magnate quebró el molde de la política interna a fuerza de polémicas. La confrontación geopolítica y el proteccionismo fueron dos sellos de su gestión. Su campaña estuvo marcada por dos intentos de asesinato y una inédita condena judicial. Si gana los comicios, romperá una "tradición" histórica del país: la única vez que un expresidente volvió al poder fue en 1893.
Elecciones en EEUU: Donald Trump, de los atentados y la condena al intento de quebrar una "tradición" de los expresidentes
Vinculado al sector de bienes raíces, el magnate quebró el molde de la política interna a fuerza de polémicas. La confrontación geopolítica y el proteccionismo fueron dos sellos de su gestión. Si gana los comicios, romperá una tradición local.
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El exmandatario estadounidense nació en la ciudad de Nueva York en 1946, fruto de la unión entre Fred Trump, un histórico empresario inmobiliario hijo de alemanes, y Mary Anne MacLeod, una inmigrante escocesa. Durante su infancia, se crió en el barrio “Jamaica” del distrito de Queens, donde asistió a la Kew-Forest School.
Durante su adolescencia, Trump forjó la personalidad que lo acompañaría por el resto de su vida. En aquellos años era definido como un “joven rebelde”, que eludía las normas y reglas de conducta. "Era un tipo bastante rudo cuando era pequeño", recuerda su padre en una entrevista con The New York Times en 1983. Esto obligó a Fred y Mary Anne a tomar una drástica decisión: a los 13 años, fue enviado la Academia Militar de Nueva York.
En la escuela militar de Cornwall-on-Hudson finalizó el secundario y, una vez graduado, comenzó sus estudios en el área de negocios. Primero fue dos años a la Universidad de Fordham en el Bronx y luego obtuvo un diploma de grado en Economía en la Universidad de Pennsylvania.
Mientras Trump atravesaba su etapa universitaria, EEUU se involucraba profundamente en una de las peores incursiones bélicas de su historia: la guerra de Vietnam. El multimillonario, quien tenía edad para ser enviado al frente, logró eludir en cinco oportunidades el llamado. Según el Times, pese a su historia clínica intachable, fue diagnosticado con una espuela de hueso en un talón. En las otras cuatro prórrogas, esgrimió cuestiones educativas. Finalmente, fue calificado “apto” pero "sólo en caso de emergencia nacional".
Haber eludido el conflicto no le impidió a Trump poner en duda la valentía de veteranos de guerra. Tiempo atrás, declaró sobre el exsenador republicano John McCain, quien estuvo prisionero en Vietnam: "No es un héroe de guerra. Es porque fue capturado que es un héroe de guerra. Yo quiero a la gente que no fue capturada".
En cuanto al negocio familiar, llevó adelante una reconstrucción para convertirlo en la multinacional “Trump Organization”. Su expansión estuvo impulsada por la ayuda de una deducción impositiva por 40 años que le otorgó la ciudad de Nueva York, que le permitió sacar de la quiebra al Hotel Commodore del Grand Hyatt.
La empresa creció al calor de la compra de hoteles de lujo y edificios de renombre, pero también debió su impulso a la adquisición y construcción de casinos, entre ellos el denominado Taj Mahal, mediante el endeudamiento con bonos de bajo respaldo que rápidamente lo llevaron a una cesación de pagos.
En la década de los 90, asfixiada por las millonarias deudas, la compañía estuvo al borde de entrar en quiebra. El magnate y su padre recurrieron a múltiples préstamos para salir del apuro. Sin embargo, los bancos y la empresa debieron reestructurar la deuda para encontrar una salida a la situación. Y fue el sector del entretenimiento el que les permitió restablecer el flujo de ingresos para pagar intereses.
Años más tarde, Trump adquirió los derechos y la organización de los concursos Miss USA y Miss Universo desde 1996 hasta 2015. Pero fue el hecho de haber tenido su propio reality show, “The Apprentice”, desde 2004 hasta 2015, el que le permitió regresar a escena luego de años de polémica gestión empresarial.
Donald Trump y su llegada a la presidencia de EEUU
La fortuna familiar y su avidez empresarial lo llevaron a convertirse en uno de los hombres más ricos del país. Según Forbes, en 2016 llegó a poseer una fortuna de u$s4.500 millones. Además, su carisma y facilidad para mostrarse frente a las cámaras lo volvieron una persona muy mediática durante su juventud, cosa que impulsó su carrera política.
Bajo el slogan “Make América Grate Again” (Hacer grande de nuevo al país), Trump lanzó su campaña presidencial en 2015 dentro del Partido Republicano. Con una retórica antiimigración, calificando a los mexicanos como “corruptos, delincuentes y violadores”, fue posicionando su discurso en los medios de comunicación, acompañado de críticas hacia la política tradicional, al avance de China y la falta de protección del empleo estadounidense.
Pese a no obtener la mayoría de votos ciudadanos en las elecciones presidenciales de 2016, logró llegar a la Casa Blanca al imponerse con 304 votos en el Colegio Electoral frente a los 227 de Hillary Clinton, envuelto en un escándalo por la filtración de mails que luego sería conocida como el Rusia Gate, una denuncia que llegó a impactar en Trump dado que tres miembros de su equipo de campaña fueron procesados por conspirar con Moscú.
Proteccionismo, Covid-19 y guerra comercial con China
Durante su gobierno, el expresidente retiró a EEUU del Acuerdo de París para la reducción de emisiones de carbono, intentó sin éxito revocar el Obamacare (medicina a bajo precio) y la ley Dodd-Frank (de regulación financiera tras la crisis de 2008). También firmó leyes para reducción de impuestos, con el fin de impulsar el regreso de empresas a territorio estadounidense para reducir el desempleo.
Su presidencia se vio fuertemente afectada por el impacto económico de la pandemia del Covid-19, un hecho que el magnate procuró minimizar desde un inicio, pese a que, al mismo tiempo, desembolsó fondos para acelerar la fabricación de vacunas y promulgó leyes de alivio económico por u$s2,1 billones para asistir a familias y empresas.
Previo a la pandemia, la economía había incorporado 6,7 millones de empleos, crecido 2,5% en promedio y los ingresos de los habitantes subían 0,8% por encima de la inflación. Sin embargo, en el balance general, tras los cuatro años, el desempleo finalizó en alza (-3 millones de empleos) y la asistencia por el Covid-19 y los recortes impositivos elevaron la deuda.
Su estrategia confrontativa elevó la tensión en múltiples oportunidades con el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, a quien amenazó con atacar abiertamente, en respuesta a las pruebas nucleares de la república asiática. Pero también fue el único presidente de EEUU en cruzar la frontera con Corea del Sur y estrechar la mano con el dictador.
En cuanto a su relación con China, Trump apostó activamente a una “guerra” de aranceles, como medida para reducir la influencia del gigante asiático en la economía estadounidense. El acero chino se vio afectado, como también los productos de Huawei, a la que incluyó en la “lista negra”, algo que luego también ocurriría con TikTok, bajo acusaciones de espionaje y utilización de información privada de los ciudadanos estadounidenses.
La disputa con China esconde un motivo que excede al ideológico. Actualmente, EEUU es el país con el PBI más alto a nivel nominal, mientras que el gigante asiático se ubica en segundo lugar y lidera el ranking en paridad de poder de compra. Asimismo, EEUU es el principal importador de productos del mundo, mientras que China lidera el top de exportadores.
Un final de mandato marcado por el asalto al Capitolio y los impeachment
Fiel a su estilo, el final de su presidencia se vio envuelto en un escándalo de proporciones históricas. Luego de la derrota en las elecciones de 2020 ante Joe Biden, Trump desconoció los resultados e incentivó una revuelta de sus partidarios que culminó con el asalto al Capitolio, en enero de 2021, para impedir la certificación de la victoria del actual presidente, donde perdieron la vida cinco personas (un policía y cuatro civiles).
Trump fue el único mandatario de EEUU en ser llevado a juicio político en dos oportunidades. La primera en 2019, acusado de haber presionado al presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, para que acusara a Biden y su hijo, Hunter, de presunta corrupción. La segunda, ya fuera de la presidencia, fue por el asalto al Capitolio. Los procesos fueron aprobados por la Cámara de Representantes pero desechados por el Senado.
Durante su mandato también logró inclinar la balanza de los conservadores en la Corte Suprema. Esto le permitió años después, en 2022, asestarle un golpe a una de las políticas sanitarias más importantes de EEUU: el fallo federal Roe vs Wade sobre el aborto, que hasta ese momento era considerado un derecho.
Dos intentos de magnicidio y una condena judicial marcaron la campaña de Trump
A sus 78 años, Trump tiene una familia muy grande y variada en todo sentido, especialmente si se refiere a sus hijos. Luego de tres matrimonios, sus cinco descendientes tienen una gran diferencia de edad y muy distintos tipos de relación con su padre. Los primeros tres, Donald Trump Jr., Ivanka Trump y Eric Trump ocupan cargos ejecutivos en su empresa y se muestran activamente junto a él. Su cuarta hija, Tiffany Trump, no tiene la mejor de las relaciones con el mandatario, llegando a asegurar que “nunca tuvo una figura paterna”. Y Barron Trump, único hijo de su matrimonio con Melania Trump, aún tiene 17 años.
Luego de dejar la presidencia, Trump se convirtió en el primer exmandatario en la historia de EEUU en ser condenado por un delito penal. En mayo de 2024 un jurado lo declaró culpable de encubrir un pago de dinero para silenciar a la actriz porno Stormy Daniels durante las elecciones de 2016. Se enfrenta a una pena máxima de cuatro años de cárcel, aunque otros condenados por ese delito suelen recibir penas más cortas, multas o libertad condicional. El encarcelamiento no le impedirá asumir el cargo si resulta vencedor en las elecciones de noviembre.
Más cercano en el tiempo, el magnate fue víctima de dos intentos de asesinato. El primero fue el 13 de julio durante un acto de campaña en Pensilvania, donde el candidato del Partido Republicano recibió un disparo en su oreja derecha y se retiró custodiado, con sangre en su cara. El tirador fue abatido por la policía. Meses después, una persona abrió fuego contra un campo de golf de Florida donde se encontraba Trump, aunque no fue herido.
El hito que busca alcanzar Donald Trump
Con las elecciones a la vuelta de la esquina, el multimillonario buscará regresar a la Casa Blanca. Si logra imponerse en los comicios frente a Kamala Harris, se convertirá en el segundo expresidente en la historia de EEUU que regresa al poder y el primero en 131 años.
El demócrata Grover Cleveland ejerció su primera presidencia en EEUU desde 1885 a 1889. Finalizado su mandato, dejó el poder en manos del republicano Benjamin Harrison. Sin embargo, cuatro años después, en 1893, volvió a ganar las elecciones. Desde entonces, es el único jefe de Estado de EEUU en haber retornado al Gobierno federal.
La tradición moderna muestra que los expresidentes estadounidenses han abandonado la carrera política luego de dejar el poder, dando paso a las nuevas generaciones. Sin embargo, Trump apuesta a dejar su nombre en la historia: si gana será el primer republicano en volver al poder.
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