La hasta ahora responsable de la agencia encargada de gestionar los impuestos en México, Raquel Buenrostro, con fama de ser de "línea dura", fue designada nueva ministra de Economía, tras la sorpresiva dimisión el jueves de su titular Tatiana Clouthier.
México: designa nueva ministra de Economía
Se trata de Raquel Buenrostro. Fue designada nueva ministra de Economía, tras la sorpresiva dimisión el jueves de su titular Tatiana Clouthier.
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Al anunciar su designación, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló hoy en Palacio Nacional que Buenrostro como titular del Servicio de Administración Tributaria (SAT) del ministerio de Finanzas hizo "un buen trabajo, no ha disminuido la recaudación" y la calificó como "una servidora pública ejemplar".
Buenrostro se graduó con honores en matemáticas en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y ganadora la codiciada medalla "Gabino Barreda" a los estudiantes más sobresalientes, con maestría en el prestigioso Colegio de México, cuenta con una larga trayectoria de 20 años en la administración pública.
Aunque la oposición le ha labrado la fama de ser "dura" y responsable de la escasez de medicamentos y de la austeridad a ultranza que dejó en la calle a miles de burócratas, también algunos expertos la consideran una mujer "escrupulosa" en el gasto público, honesta y pieza clave en la lucha anticorrupción del presidente.
La designación confirmó los temores de algunos analistas de que fuera designada una persona menos cercana a los empresarios y más al ala monopólica y estatista, que algunos consideran domina en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, hombres de negocios cercanos al gobierno como el Consejo Coordinador Empresarial saludaron la designación y confiaron en "su capacidad para abonar al desarrollo económico de la ciudadanía y las empresas y trabajar en favor de la reactivación económica de México".
Algunos expertos habían manifestado desde ayer su preocupación sobre un eventual giro en la política en el sector, ante el "fracaso" que ha tenido el gobierno en temas como el bajo crecimiento y la alta inflación.
Clouthier leyó su carta de renuncia llena de palabras de afecto agradecimiento y con la voz entrecortada frente al propio López Obrador, frenó un poco las especulaciones sobre desacuerdos con el jefe de Estado.
Ello no evitó, sin embargo, que hoy los medios de prensa formularan hipótesis sobre eventuales desacuerdos de la ministra saliente, una antigua compañera de lucha de López Obrador a pesar de sus vínculos con los empresarios, y de ser hija de un líder opositor y ex candidato presidencial de derecha, Manuel Clouthier, fallecido de un sospechoso accidente en 1989.
Por ejemplo, estimaron entre otras cosas que la ex ministra creía que la política energética del gobierno sí viola el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá (T-MEC), vigente desde 1994, como lo considera Washington, y que en un panel de controversia México perdería.
Clouthier era precisamente la cabeza de las negociaciones con el país vecino, que llamó hace unos meses a consultas en el marco de los mecanismos de arbitraje del T-MEC, por considerar que la política energética mexicana afecta las inversiones de sus empresas y el medio ambiente.
La renuncia ocurre justamente cuando se cumple el límite de 75 días para que concluyan las consultas y se llame, en caso de no alcanzar un arreglo al diferendo, a un panel de controversias, aunque no se trata de una "fecha fatal", sino un plazo mínimo.
La oposición en el Congreso reaccionó a la dimisión de Clouthier con fuertes críticas por el manejo negativo del gobierno que ha impedido atraer las inversiones y la falta de apoyo a las pequeñas y medianas industrias.
"La economía es un desastre. Problemas inflacionarios, baja inversión, salida de capitales, obras al doble del costo que se dijo, disminución del salario real, incremento de la violencia, entre otras cosas nos tienen en la ruina", afirmó Alberto Acosta, diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI, centro).
En todo caso, las organizaciones cúpula del sector privado abogaron por que, independientemente de quien ocupe el cargo en el ministerio, mantenga vínculos estrechos con los empresarios y sepa escuchar sus propuestas.
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