Millones, cárcel y quiebra: la historia de Lenny Dykstra, la leyenda del béisbol que perdió toda su fortuna

Tuvo grandes temporadas en las ligas más importantes de Estados Unidos, ganó millones, pero desde su retiro cayó en picada.

Ganó millones en la MLB pero tuvo un retiro olvidable.

El béisbol es uno de los deportes más importantes de los Estados Unidos, y la Major League Baseball (MLB) es la más atractiva de todo el mundo. Por este motivo, sus estrellas suelen ganar millones de dólares y hasta se realizan exhibiciones que reúnen a las mejores para un enfrentamiento especial.

Una de estas superestrellas, sin dudas, es Lenny Dykstra, un histórico jardinero de los New York Mets, que ganó una fortuna en sus tiempos de beisbolista, pero terminó en la quiebra y preso por lavado de dinero. Después de su retiro, fue noticia por recibir dos condenas que significaron mucho tiempo en la cárcel.

Millones dilapidados, drogas y crímenes. El terrorífico final de Lenny Dykstra.

Protagonista por las razones equivocadas: quién es Lenny Dykstra y cómo perdió sus millones

Lenny Dykstra jugó un total de 12 temporadas en las grandes ligas de béisbol, y fue parte de dos equipos. En primer lugar, de los New York Mets, y por otro lado en los Philadelphia Phillies. Además, en ese lapso de tiempo, se dio el gusto de participar en 3 ediciones del "All Stars Game", un partido anual de béisbol que enfrenta a los mejores jugadores de la Liga Americana y la Liga Nacional de la MLB.

Dykstra fue miembro de aquel célebre equipo de los Mets de Nueva York que ganó la Serie Mundial en 1986. Aquellos Mets eran conocidos por su fuerte adicción a las drogas y al alcohol. Y tras retirarse, no pudo torcer el rumbo. Además, empezó a involucrarse en el mundo de las inversiones financieras y no dudó en llevar adelante todo tipo de fraudes.

En 2009, se le acusaba de hacer estafas con sus tarjetas de crédito, entre otras cosas. Ese mismo año, el ex jugador se declaró en bancarrota, a pesar de que se le valuaba en alrededor de 58 millones de dólares. En 2012, fue encontrado culpable por un juzgado federal de diversos crímenes cómo robo de autos, fraude fiscal y lavado de dinero, siendo sentenciado a 6 meses de prisión, 500 horas de servicio comunitario y una multa de 200 mil dólares.

Los problemas no desaparecieron al salir en libertad. Fue acusado por un conductor de Uber de apuntarle con una pistola para robarle y se lo vio buscando dinero en la basura, drogado probablemente con metanfetaminas.