24 de junio 2025 - 10:32

Desafíos macrofiscales de la Argentina y el futuro de la balanza comercial

La balanza comercial ha experimentado un ajuste crítico, y con un endeudamiento creciente y una falta alarmante de acumulación de reservas, los actores del mercado deben prestar atención a las señales de advertencia que surgen.

A medida que nos adentramos en los meses venideros de 2025, el equipo económico y los actores del mercado enfrentan un panorama potencialmente angustiante.

A medida que nos adentramos en los meses venideros de 2025, el equipo económico y los actores del mercado enfrentan un panorama potencialmente angustiante.

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En un contexto donde los ahorristas en pesos y dólares son cada vez más curiosos, los recientes indicadores macroeconómicos de Argentina despiertan cierta preocupación. Con un superávit comercial que, aunque positivo, muestra signos de debilidad, y un resultado fiscal descendiente, la situación se torna preocupante. La balanza comercial ha experimentado un ajuste crítico, y con un endeudamiento creciente y una falta alarmante de acumulación de reservas, los actores del mercado deben prestar atención a las señales de advertencia que surgen. ¿Estamos ante un escenario de recesión? ¿Es la falta de dólares privados la causa de una balanza comercial que, a pesar del superávit, no logra sostenerse? En este artículo, exploraremos las dinámicas que configuran el panorama económico actual y lo que esto podría significar para el futuro inmediato.

La balanza comercial de mayo mostró un superávit de u$s600 millones, lo que elevó el superávit comercial acumulado a u$s1.900 millones. Tras ajustar por estacionalidad, el superávit comercial anualizado de los últimos 3 meses aumentó con respecto al mes anterior a u$s4.200 millones, aunque bajó de los u$s12.000 millones registrados en los últimos 12 meses

El valor de las exportaciones aumentó ligeramente, un 0,4 % intermensual en mayo, mientras que las importaciones disminuyeron un 4,3 %. Esto representa un cambio con respecto a la dinámica acumulada en el año, cuando las exportaciones disminuyeron un 4 % y las importaciones aumentaron un 4,3 % en comparación con los niveles de diciembre. ¿recesión? ¿falta de dólares privados? Cabe destacar que las importaciones en valor -ajustadas por estacionalidad- aumentaron un 37% en comparación con el mínimo de 2024 -acontecido en agosto-, en consonancia con el repunte de la actividad. Sin embargo, se mantienen un 23% por debajo del nivel máximo observado en junio de 2022-gobierno de Alberto Fernández- cuando la demanda interna era mayor.

Exportacion Exportaciones Importacion Balanza Comercial Superavit
Balanza comercial: clave para el Gobierno.

Balanza comercial: clave para el Gobierno.

En cuanto a volúmenes, las exportaciones aumentaron un 9% intermensual en mayo, mientras que las importaciones se mantuvieron relativamente estables (-0,1%). La primarización de las exportaciones es manifiesta. El aumento mensual de las exportaciones sigue liderado por los bienes primarios, que aumentaron un 23,1% mensual, acumulando 42% en el año. Las exportaciones de manufacturas industriales se recuperaron un 11,3 % intermensual, aunque aún se mantienen hundidas en comparación con los niveles de diciembre de 2024 (-12 %) en estos 5 meses. Es obvio que el aumento de los costos locales en dólares estadounidenses presiona los márgenes. Las exportaciones de energía registran una caída del 38 % en los primeros 5 meses del año.

Los precios de exportación bajaron un 2,3 % en mayo, mientras que las importaciones aumentaron un 0,5 %. Por lo tanto, los términos de intercambio se han deteriorado ligeramente, un 2,8 %.

Es imprescindible que el superávit secuencial crezca en el segundo trimestre. El gobierno habla de una proyección que se basa en la recuperación de los volúmenes de exportación tras “el bache del primer trimestre”, el crecimiento del volumen de importación se desacelera por la recesión y algunas nuevas restricciones habrá a partir de julio, tras la aceleración observada en el primer trimestre del año. Bajo estos supuestos, el gobierno aspira que la balanza comercial de mercancías converja a U$S10.000 millones para todo el año, reduciéndose desde los U$S19.000 millones registrados en 2024. Nuestras proyecciones son más sombrías, aproximadamente 20% menos, sumando alrededor de U$S8.000 millones.

En mayo, -según datos oficiales-; el saldo primario alcanzó un superávit de $1,7 billones, llevando el superávit fiscal acumulado al 0,8% del PBI, en comparación con el 1,1% del mismo período del año anterior (-27.27%). El saldo general registró un superávit de $662.000 millones, acumulando un superávit acumulado al 0,3% del PBI o, 0,1 puntos porcentuales por debajo del mismo período del 2024. En un período acumulado de 12 meses, el superávit primario alcanzó el 1,3% del PBI en mayo, con un superávit general del 0,2% del PBI.

Dado que la restricción fiscal es fundamental para el gobierno, resulta básico que tendrá que profundizar en la dinámica fiscal subyacente. En cuanto a los ingresos, las entradas reales disminuyeron (-13,9%) interanual en mayo (-1,5%) intermensual, semestral. Esta disminución se debió a reducciones en los ingresos por exportaciones e impuestos sobre la renta, influenciados por efectos de base. Excluyendo estas categorías, los ingresos se sitúan 3% por encima del promedio 2024, lo que refleja un repunte sobre el nivel de actividad en 2025, aun así, todavía está 14.2% por debajo de los niveles de 2017.

En cuanto al gasto, el gasto real disminuyó un 1,9% interanual en mayo. En términos mensuales, el gasto primario se redujo 3,8% intermensual, en términos reales, impulsado por caídas en el consumo (-3,2%) y desplomes en el gasto de capital (-15,2%). Esta baja se profundiza al 4,9% en comparación con el promedio de los últimos tres meses, durante los cuales se observó un aumento real del gasto primario, impulsado principalmente por transferencias sociales, transferencias a provincias y gasto de capital. En términos de niveles, el gasto ha regresado a los niveles promedio de 2024 y se encuentra un 20% por debajo de los promedios 2017-2023.

De aquí en adelante Milei empieza a gobernar con una oposición que estaba desarticulada, y un nivel de reclamo social creciente. Esto significa que la restricción fiscal dependerá más del aumento de los ingresos (recaudación) que de la disminución del gasto (motosierra), dado el limitado margen para realizar nuevos ajustes.

A medida que nos adentramos en los meses venideros de 2025, el equipo económico y los actores del mercado enfrentan un panorama potencialmente angustiante. La dependencia del aumento de ingresos frente a la restricción del gasto sugiere que cualquier desvío en las proyecciones podría tener consecuencias. La presión sobre los márgenes de exportación-por el aumento de costos en dólares-, el deterioro de los términos de intercambio y la creciente dificultad política y social complican aún más la situación. Si las proyecciones más sombrías se materializan, los meses que restan hasta fin de año podrían marcar un periodo de tensión que impactará directamente en la confianza de los inversores y los ahorristas, tanto en pesos como en dólares. Los desafíos son claros, y la necesidad de una respuesta efectiva se vuelve más apremiante que nunca.

Director de Fundación Esperanza. Profesor de Posgrado en UBA y universidades privadas. Máster en Política Económica Internacional, Doctor en Ciencia Política, autor de seis libros.

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