La Alianza por el Trabajo, Justicia y Educación se imponía ajustadamente anoche en las elecciones a senador, frente al justicialismo en la provincia de Río Negro. Luis Falcó y Amanda Isidori (delarruista) se aseguraban, respectivamente, una banca en la Cámara alta al obtener 35,08 por ciento, de los votos, mientras que Miguel Pichetto también consiguió un escaño con 28,35 por ciento. El dirigente rionegrino responde a la línea Duhalde.
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Pese a que había 15 mil nuevos electores, sólo votó un poco más de 65 por ciento del padrón electoral. Como en el resto del país, la cantidad de votos en blancos y nulos fue alta, y así se perfilaba como la segunda fuerza, con 28 por ciento de las preferencias de los votantes. Un dato llamativo, en mesas de Cipolletti, Roca y Viedma se detectó una gran cantidad de sobres que contenían la foto del terrorista Osama bin Laden.
En la elección para diputado, la Alianza también logró imponer a su candidato Julio Accavallo, mientras que el justicialismo ganó un lugar para Carlos Larreguy.
El peronismo cabalgó sobre la mala imagen y la magra gestión del gobernador Pablo Verani, pero no le alcanzó para romper la tendencia de las elecciones pasadas. En las elecciones de octubre de 1999, dos de las tres bancas que estuvieron en juego para diputados nacionales fueron para la Alianza. Desde el retorno a la democracia en 1983, Río Negro es gobernada por la Unión Cívica Radical. En las últimas elecciones realizadas en 1999, la Alianza con mucha fuerza en la región ganó con 52,5 por ciento duplicando los votantes de la segunda fuerza, el PJ que alcanzó 25,5 por ciento. El resultado de los comicios podría influir en una eventual renovación de gabinete que prepara el gobernador Pablo Verani.
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