8 de agosto 2011 - 12:31

De la Sota mantiene la incógnita sobre el apoyo del PJ cordobés a la candidatura de Cristina

José Manuel De la Sota
José Manuel De la Sota
El gobernador electo de Córdoba, José Manuel De la Sota, mantuvo este lunes la incógnita sobre el apoyo que dará el justicialismo de su provincia a la candidatura a presidente de Cristina de Kirchner en las primarias del 14 de agosto.

"Mañana se reunirá el partido. Pienso que corremos con gran desventaja porque no llevamos candidato a Presidente y el domingo hay dos elecciones: una de los presidenciables y otra de los legisladores", dijo al comenzar la explicación y antes de fijar su posición personal. "Los legisladores de nuestra lista son los que defienden a Córdoba. No sé que va a resolver el partido, pero estimo que los va a mantener, aún sin candidato a Presidente", expresó en declaraciones a una radio cordobesa.

De la Sota insistió que con su victoria nació el "cordobesismo" y lo explicó como "una idea superadora de las diferencias de los partidos y las peleas feroces entre los dirigentes". Según sus deseos y ambiciones, además de "un país fuerte" se necesitan "provincias fuertes" por eso "pido que respeten la pluralidad".

En rigor, la relación entre el kirchnerismo y el peronismo cordobés siempre fue complicada. De hecho, De la Sota, con Néstor Kirchner primero y con Cristina de Kirchner después, arrastraron facturas mutuas desde la campaña presidencial de 2003. En ese malestar se vio sumergido también el actual gobernador Juan Schiaretti, quien, por caso, no aceptó ser diputado nacional por el FpV en 2005, y confrontó con Nación en medio del conflicto con el campo, en 2008.

En las legislativas de 2009, en sintonía, Schiaretti llevó como candidato a senador a Eduardo Mondino, ligado al duhaldismo, y el FpV le dividió los votos con Eduardo Accastello. Finalmente Mondino terminó tercero, Accastello cuarto, y las tres bancas en el Senado quedaron en manos del Frente Cívico (Juez y Norma Morandini) y la UCR (Ramón Mestre).

Semanas antes de la votación de este domingo, la gota que derramó el vaso fue la elección de Alicia Pregno como compañera de fórmula de De la Sota. Esa decisión terminó por romper las negociaciones con el kirchnerismo para las internas del 14 de agosto y las nacionales del 23 de octubre.

De la Sota ahora promueve una lista propia de candidatos a diputados nacionales distinta a la que la Casa Rosada pretendía con el sello del FpV, colgada de la postulación de Cristina. Por el vencimiento de plazos, ahora el PJ no podrá atarse a esa boleta y las opciones que quedan son tres: que el kirchnerismo cordobés presione en el consejo del PJ y el delasotismo baje su lista para acrecentar las posibilidades K; que De la Sota mantenga su boleta, pero que se exprese un apoyo orgánico a la postulación de Cristina, o que el justicialismo se rinda a los pies del duhaldismo macrista y que De la Sota no baje su lista y reniegue de la candidatura de la Presidente.

En la primera entrevista radial luego de consagrarse ganador dio algunas pistas más al referirse a su futura relación con el Gobierno nacional. "A la Nación le decimos lo que ya saben: que cuenten con Córdoba para trabajar, pero para unir, no para dividir; para la construcción de un federalismo en serio que resuelva problemas y no para crearlos", sostuvo al reiterar partes del discurso que brindó el domingo desde su búnker de campaña.

Con el 95,7% de las mesas escrutadas Unión por Todos (De la Sota) logró 42,6% de los votos, el Frente Cívico de Luis Juez 29,5% y el radicalismo con Oscar Aguad 22,9%. La encuestadora que más se acercó en los pronósticos de boca de urna fue Aresco, de Julio Aurelio, que vaticinó sobre 6.000 casos 40,1%, 29,1% y 24,5%, respectivamente.

Pero De la Sota también tomó distancia de Cristina de Kirchner en materia de Derechos Humanos, un pilar de los gobiernos kirchneristas que impulsan el juicio y castigo a los represores desde 2003, pero que sacudió en los últimos meses con la investigación de irregularidades en la Asociación Madres de Plaza de Mayo."Hay que mirar el futuro y no sólo el pasado. Estoy de acuerdo con que tengamos memoria, pero también hace falta mucha imaginación. Hay que escribir los Derechos Humanos de los años que vienen. Los argentinos tenemos que dejar de vivir con las trincheras siempre cavadas, no puede ser que cada elección sea una guerra. Muchos tienen que aprender que una elección no puede transformarse en una guerra", detalló.

Además, De la Sota respondió a las declaraciones que expuso este lunes Aníbal Fernández. El jefe de Gabinete había afirmado que el Gobierno nacional "no tiene vocación de dividir a nadie" y el gobernador electo replicó: "Es bueno que mi mensaje haya llegado a la Casa Rosada. Todo lo que contribuya a que tengamos un país mejor, a que trabajemos por un país mejor, es bueno".

"La clase dirigente -continuó- tiene que darse cuenta que el pueblo merece ser un poquito más feliz. Haríamos más feliz a la gente si nos diéramos cuenta que el peronismo, el radicalismo, el socialismo, kirchnerismo no deben ser razones para dividir. Si otros países lo han logrado, que han tenido hasta guerras, por qué nosotros no lo vamos a lograr".

Entre los "saludos y apoyos" que ha recibido de otros dirigentes y precandidatos a cargos en otros distritos mencionó los llamados de "mi amigo el colorado (Francisco) De Narváez", de Daniel Scioli, del entrerriano Sergio Urribarri, de Ramón Mestre, de Oscar Aguad, de Eduardo Duhalde y de los peronistas del PRO con Cristian Ritondo y Diego Santilli a la cabeza, que también confesó que es "su amigo hace muchos años".

Pero en el diálogo radial también contó intimidades del llamado de la mandataria, pocos minutos después del cierre de urnas. "La Presidente me llamó por teléfono para felicitarme y yo le dije que todavía no tenía datos oficiales, que eran solamente boca de urna", relató.

"Le dije 'le agradezco su saludo, pero la verdad no puedo decirle nada hasta que no haya datos oficiales yo no voy a decir absolutamente nada'. Ella me dijo que habían seguido (los comicios), monitoreando la situación, que había hablado con Eduardo Acastello, al cual le agradezco (porque) hizo un trabajo maravilloso, es un dirigente para sacarse el sombrero", completó sin más detalles.

Antes de terminar la entrevista con la emisora local, el periodista volvió a interrogar sobre la decisión que tomará el PJ cordobés y De la Sota volvió a irse al mazo. "Mañana nos reunimos y seguramente tomaremos la decisión respeto de la lista y vamos a decir qué es lo que resuelve el Partido Justicialista de Córdoba, que si bien yo no soy autoridad del partido, las autoridades han resuelto convocar a una reunión para mañana a la mañana y vamos a tener la respuesta", manifestó.

Y recordó: "Anoche dije que todavía mi vida he sido un peronista cordobés y hoy son un cordobés peronista y el orden de los factores si que altera el resultado del producto. Para mi primero está mi provincia, y quiero un país con provincias fuertes y autónomas, que nadie las maneje. Interiormente para decidir mi voto voy a pensar: ¿Quién va a favorecer más a mi provincia?".

"Mi rumbo es Córdoba, no estoy pensado en otra cosa. Quiero que sigamos el rumbo que le ha puesto Schiaretti", completó.

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