16 de septiembre 2008 - 00:00

Duhalde activa la ambulancia en Buenos Aires

Eduardo Duhalde
Eduardo Duhalde
Bonaerense al fin, Eduardo Duhalde terminó de bosquejar un operativo para regresar a su provincia. Lo hará desde el extremo sur, casi Patagonia, para remontar, por etapas y pausado, hasta aterrizar quizá sobre fin de año en el conurbano profundo.

Siempre con la promesa de que no será candidato «a nada» y «nunca más» y la excusa de discutir la agenda productiva, el ex presidente planea sembrar el interior de Buenos Aires con locales del MPA, especie de unidades básicas del peronismo productivista.

  • Pedido

  • Ese proceso, en privado, Duhalde lo enlaza con los alertas, que dice recoger in situ, sobre la marcha de la economía y con un -según puntualiza- lento pero continuo pedido de dirigentes del PJ, hoy ligados al kirchnerismo, de «volver» a ser tropa duhaldista. Es un cóctel, donde -de acuerdo con el diagnóstico del ex presidente- se combina el deterioro de la economía, la crisis profunda que enfrenta el gobierno de los Kirchner y factores de entrecasadel PJ bonaerense, que anticipa una diáspora de alcaldes K.

    «Le piden que los vuelva a conducir pero él los para diciéndoles que no es el momento», explican al lado del ex gobernador. En teoría, los que acosan a Duhalde son intendentes del PJ del conurbano que añoran la jefatura del hombre de Lomas de Zamora.

    Más allá de las cuestiones macro, hay cuestiones coyunturales, casi domésticas que explicarían ese supuesto reencantamiento de caciques del peronismo con quien controló, durante una década y media,-con su libretita negra y un lápiz tullido, el mayor ejército político del país. Ese factor, indican en las cercanías del bonaerense, tiene nombre y apellido: Alberto Balestrini. El vicegobernador fue promovido por Néstor Kirchner como jefe del PJ y, más que las objeciones a su figura, disgustó el mecanismo, ultra rápido y sin ningún simulacro de consenso, con que se lo nominó.

    Un mes atrás, en Olivos, Kirchner se paró ante un puñado de intendentes de la zona atlántica y los desayunó: «Este es mi candidato a presidente del PJ bonaerense». De arrebato, el matancero quedó proclamado de facto como futuro jefe del peronismo.

  • Desagrado

    Días atrás, el jefe de Gabinete, Sergio Massa, escuchó de varias bocas el desagrado por los modos.

    - Queremos un peronismo moderno y abierto pero a Balestrini lo pusieron con el dedo -opinó, en voz bien alta, un legislador de peso-.

    - ¿No te gusta? ¿Presentatecontra Alberto? -retrucó Massa, siempre sonriente, pero ácido.

    - Vos sabés que no están dadas las condiciones -lo tanteó el dirigente-.

    Cauto, Massa prefirió interrumpir el diálogo y aceptó, a regañadientes, otras objeciones que eran acompañadas por los demás comensales, algunos ministros, otros legisladores, todos peronistas.

    Esa crispación, que no parecereferir en concreto a Balestrini, empuja a sectores del peronismo hacia Duhalde, según manda a decir el ex presidente.

    Por ejemplo, este viernes, en Carmen de Patagones, el ex gobernador abrirá su MPA patagónico -esa ciudad es casi considerada patagónica- de la mano de Haroldo Lebed, y donde mostrará sobre el escenario a Sergio «Chino» Villordo, ex anibalista que se duhaldizó.

    La secuencia post-Patagones incluirá escalas en Bahía Blanca, Balcarce y Tandil. Ya hizo, meses atrás, su presentación en Mar del Plata. Prepara, además, un show más ruidoso y pretencioso para su desembarco en La Plata. Es una parada fuerte antes de llegar al conurbano.

    En simultáneo, anima el trabajo de Javier González Fraga en la subsede MPA de la Capital, que quiere reunir a las cámaras empresarias en ese foro productivista y llamar, además, a referentes de los partidos de la oposición y a referentes sindicales.

    A esa costura se dedican en banda Miguel Angel Toma, Dante Camaño y Daniel Amoroso, entre otros, mientras Carlos Brown se encarga de la sede central como responsable ejecutivo del MPA.

    Sin embargo, Duhalde insiste en mantenerse lejos de la interna oficial del PJ programada para el 30 de noviembre en la que será electo Balestrini. Algunos de sus laderos jugarán en los territorios pero, orgánicamente, no patrocinará ninguna boleta aunque ronda, por ahí, la postulación de Daniel «Chicho» Basile.
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