Duro cruce de cancilleres
La Argentina hizo todo lo posible para que el conflicto por las papeleras no sea tema de discusión en la cumbre del Mercosur. No pudo ser. Uruguay logró introducirlo en la reunión de cancilleres y provocó un duro contrapunto entre Jorge Taiana y Reinaldo Gargano. El primero dijo que Uruguay no quiso negociar y el segundo criticó los cortes de Gualeguaychú. El resto de Sudamérica mira con pena el conflicto.
-
El gobernador de Chubut responsabilizó a la RAM por los incendios en Epuyen
-
Por los incendios en Epuyén, Victoria Villarruel canceló su viaje a Chubut
Taiana también se quejó de la falta de predisposición al diálogo del gobierno uruguayo. El cruce, aunque picante, duró apenas unos cinco minutos. Los gestos de fastidio del canciller brasilero, Celso Amorim, hicieron que tanto Taiana como Gargano cerraran ese debate que dio por tierra con la posibilidad de un encuentro bilateral de cancilleres que, según el Palacio San Martín nunca estuvo agendado. Fuera de la Reunión del Consejo del Mercado Común, celebrada en el hotel Copacabana Palace, el ministro interino de Medioambiente del Uruguay, Jaime Igorra, aseguró que su país «nunca está cerrado a minimizar el síndrome temeroso que genera a 30 kilómetros» de la pastera Botnia, en la ciudad argentina de Gualeguaychú, su instalación.
Los funcionarios uruguayos, fuera de micrófono, destacaron como positivo el gesto del gobierno de Néstor Kirchner de condenar los cortes. El encuentro de cancilleres arrancó con media hora de demora. Amorim dio un breve discurso de bienvenida a sus pares y a los ministros de Economía de la Argentina, Brasil, Paraguay, Venezuela y Uruguay.
«El Mercosur es una realidad ineludible a nivel mundial y no es posible pensar en América latina, sin pensar en el Mercosur», dijo Amorim, quien además alabó el crecimiento de las economías y los intercambios comerciales que se produjeron desde su creación en 1991, y del que afirmó que no hubo «ningún otro bloque en el mundo que creciera tanto en tan poco tiempo».
El canciller brasileño aseguróque el Mercosur no es de los gobiernos ni de los Estados ni de las economía, sino de los pueblos; y sostuvo que fueron «los pueblos los que no permiten que fracase». Enumeró los avances del organismo regional y particularmente la constitución del Parlamento, que permitirá, dijo, la aprobación de iniciativas y la generación de nuevos aportes creativos.
La delegación Argentina estuvo representada por Taiana y la titular de Economía, Felisa Miceli, además del subsecretario de Integración, Eduardo Sigal; el secretario de Comercio y Relaciones Económicas de la Cancillería, Alfredo Chiaradía, y el titular de Cascos Blancos, Diego Fucks. Tras el discursos, los ministros deliberaron durante dos horas en una reunión cerrada al periodismo, para concluir la agenda de los acuerdos que analizarán esta tarde y mañana los presidentes de los países miembros.
Mientras se debatía en el primer piso del hotel, al borde de la de lujosa piscina de 20 metros de largo por 8 de ancho, otra parte de la delegación argentina aprovechó su tiempo libre para desayunar y relajarse. Sentados al borde de la pileta, estaban el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini; el jefe de los diputados kirchneristas, Agustín Rossi; el líder del bloque neokirchnerista José María Díaz Bancalari; el presidente de la Cámara baja, Alberto Balestrini, y el embajador argentino en Brasil, Juan Pablo Lohlé, quien confirmó que hoy a las 9.30 de la mañana habrá un encuentro entre Kirchner y Luiz Inácio Lula da Silva. No hubo mención a los proyectos para prohibir la exportación de madera al Uruguay que ingresaron en la Legislatura entrerriana y en el Senado de la Nación. Consultado por este diario, Rossi informó que en la Cámara de Diputados no existe por el momento ninguna iniciativa similar. Y que de esta cumbre tampoco saldrá ninguna novedad sobre el funcionamiento del Parlamento del Mercosur.
Dejá tu comentario