Finalizó debate en comisión y el oficialismo busca imponer dictamen
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"La oposición ha logrado que se devuelvan 1.300 millones de pesos al campo", exclamó sorprendido Sanz, tras pedirle a Ríos que reiterara esa novedad.
Ríos fue precisamente quien habló al empezar la sesión, para destacar que el proyecto que viene de la Cámara Baja, "mejora sensiblemente la Resolución 125", pues "tiende un manto protector para los pequeños y medianos productores".
No obstante, evitó extenderse en el tema, al indicar que su bancada "va a dar debate en el recinto".
Por su parte, Sanz sostuvo que esa postura "desnaturaliza la concepción del Senado como cámara revisora", y consideró que el oficialismo "no tiene argumentos".
En especial, el legislador mendocino criticó el plazo del 31 de octubre para la vigencia de los reintegros a los productores, y que la devolución sea tomando el precio FAS, y no el FOB.
En el marco del plenario fueron presentados tres proyectos alternativos, el de Carlos Reutemann, el del radical K Pablo Verani y otro presentado por radicales, la Coalición Cívica y partidos provinciales.
Reutemann explicó que su iniciativa tiende efectivamente a "desojizar", porque el proyecto oficial no contempla el caso del maíz, "cuya semilla e insumos son muy caros, y que estimó en "500 dólares por hectárea".
Por ese motivo, y tras subrayar que no se opone al concepto de retenciones, propuso para el maíz una alícuota máxima del 22 por ciento.
Además, advirtió que el Gobierno toma para los cálculos los rindes de las zonas más productivas y que en otras regiones, con estos niveles de retenciones, la ecuación no cerrará para los hombres de campo.
Por su parte, Verani explicó que la suya elimina los artículos uno y dos del proyecto oficial, y se establece distintas alícuotas para el maíz, trigo y soja, con un techo del 48 por ciento.
En tanto, los radicales y otras bancadas proponen una alícuota fija del 20 por ciento para la soja y girasol, y del 15 para el trigo y maíz.
A este valor se debe sumar un "derecho progresivo y segmentado", según el tamaño de la producción, hasta un máximo del 35 por ciento para la soja y del 30 para el resto de los granos.
Asimismo, se permite como computar como gasto deducible del impuesto a las ganancias hasta el 70 por ciento del gasto realizado en fertilizantes.
También se otorgan compensaciones por fletes a los productores de hasta 1.500 toneladas de granos situados a más de 400 kilómetros del puerto más cercano.
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