Los dos espías argentinos recluidos en Uruguay luego de que se les acusara de intervenir los correos electrónicos de políticos y famosos podrían revelar los pormenores de la operación, al declarar ante la justicia argentina.
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Uno de ellos, Pablo Carpintero, se entregaría a la Justicia para que lo interrogue la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, mientras su compañero Iván Velázquez permanece preso en Montevideo, donde escribe su autobiografía.
Así lo consignó un matutino porteño, donde se detalló que los acusados podrían revelar quién les encargó la operación clandestina en la que habrían intervenido los correos electrónicos del ex jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y de jueces de la Corte Suprema, como Ricardo Lorenzetti y Raúl Zaffaroni, entre otros.
En la causa también están imputados el jefe de la SIDE durante el menemismo, Juan "Tata" Yofré, el ex general del Ejército Daniel Raimundes, y el presidente del sitio web Seprin, Héctor Alderete.
Los dos espías llegaron a Uruguay en mayo de 2008, luego de que estalló el escándalo, y allí pidieron asilo político tras alegar que eran perseguios a causa de una pelea interna en la SIDE entre el director de Operaciones, Antonio Stiusso, y el director de Reunión Interior, Gustavo Pocino.
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