Papeleras, peor: habrá bloqueos sorpresa a barcos hacia Uruguay
Lejos de avanzar hacia una solución, el conflicto con Uruguay por la pastera de Botnia amenaza con dolores de cabeza más serios al gobierno. Los asambleístas de Gualeguaychú decidieron anoche realizar protestas sorpresivas en Buenos Aires. Su idea es impedir la salida de ferries, pero no se descarta que los actos se limiten a volanteadas. Cuando la amenaza del bloqueo fluvial se esbozó por primera vez, el gobierno prometió usar a la Prefectura para impedirlo. Lo decidido ayer lo pone ante el dilema de actuar con una firmeza que hasta ahora evitó o permitir una nueva escalada del conflicto. Además, los asambleístas decidieron hacer total el bloqueo de puentes. Para esto enviarán gente propia a Colón (donde los cortes hasta ahora son intermitentes) e impondrán la misma medida en el puente Concordia-Salto.
-
La reacción de la oposición, a un año del gobierno Milei: "Calamidad y desastre"
-
El procurador Casal dictaminó en contra de la reelección indefinida de Insfán en Formosa
Por su parte, ambientalistas de la ciudad entrerriana de Colón rechazaron ayer la posibilidad de sumarse a eventuales piquetes contra las partidas de ferries desde Puerto Madero, al considerar que la medida «supera» sus capacidades de movilización.
Previsiblemente, la temporada de verano 2007 se inició con un movimiento récord en el
ingreso de pasajeros y automóviles a Uruguay por el puerto de Colonia, 180 kilómetros al oeste de Montevideo, como consecuencia de los cortes en los puentes.
Según fuentes portuarias -que cita el diario uruguayo «El País» en su edición de ayer-, el ingreso de vehículos por esa vía fluvial en lo que va de la temporada registró un aumento de 41% respecto de igual período del año pasado.
La intención de los ambientalistas es, precisamente, complicar el acceso de turistas a los destinos vacacionales uruguayos para protestar por la continuidad de la construcción de la pastera Botnia.
En rigor, las trabas para el normal flujo de visitantes son ya un hecho, y quedaron nuevamente evidenciadas ayer, cuando empresarios uruguayos del transporte internacional de pasajeros anunciaron que reclamarán al gobierno de Tabaré Vázquez que los compense por tener que sostener rutas alternativas para unir Buenos Aires con Montevideo, que les representan casi 200 kilómetros más de recorrido.
Según el presidente de la entidad que agrupa a los propietarios de las empresas de ómnibus, Augusto Victorica, en diciembre «se transportó a menos de la mitad de los pasajeros» que usualmente viajan entre esas ciudades «en estas fechas». «Si el año pasado faltaron 120.000 turistas en la temporada, este año serán muchos más», afirmó.
Este escenario se da a partir del corte total del puente Gualeguaychú-Fray Bentos, y a los bloqueos intermitentes que afectan al paso Colón-Paysandú (ayer los vecinos ratificaron su decisión de mantener esa modalidad durante «todo el verano»). Sólo la vía Concordia-Salto permanece aún libre de piquetes.
Pero no es la única embestida en la que avanzan los ambientalistas de Gualeguaychú, ya que esta semana terminarán de definir la carta que planean presentar personalmente al embajador de Venezuela en la Argentina, Roger Capella Mateo, para pedir que el presidente de ese país, Hugo Chávez, intervenga en este conflicto.
Además los vecinos delinean una misiva para advertir a bancos privados sobre la inconveniencia de otorgar potenciales financiamientos a Botnia. La estrategia incluiría la instalación de carteles en la Ruta 136 para «escrachar-» a entidades financieras interesadas en otorgar préstamos a la empresa.
«También insistiremos con que se sancione una ley que impida la exportación a Uruguay de madera argentina destinada a plantas de celulosa de este país», afirmó uno de los vecinos.
En paralelo, un grupo de ambientalistas analizaba anoche con los organizadores del carnaval del país la posibilidad de lograr «una mayor participación» en el tradicional evento de Gualeguaychú, para difundir la problemática en torno a la instalación de la pastera.
La celebración arranca el próximo sábado, y concentra en cada fin de semana cerca de 30 mil turistas. La encargada de abrir el desfile será Evangelina Carrozo, reina del Carnaval 2006 y cuya figura se popularizó luego de que desfilara en bikini con un cartel en contra de las pasteras, frente a los sorprendidos presidentes que asistían a una reciente cumbre de América latina y Europa, en Viena.
Dejá tu comentario