Mar del Plata (enviado especial).- El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, realizó un duro diagnóstico del peronismo, aunque confió en construir una alternativa superadora. En una charla al margen del Coloquio de IDEA habló sobre institucionalidad, la apuesta para las elecciones legislativas y cómo ve el ritmo de la economía.
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El salteño es hoy uno de los jugadores que emerge fuerte de cara al escenario 2017. Tiene capital político, es cultor de una "oposición inteligente, que deja gobernar", creció fuerte su nivel de conocimiento y es uno de los pocos políticos que desde siempre y pese a haber sido parte del kirchnerismo, gozó con el visto bueno de los hombres de negocios. Además, ya cuenta con una hoja de ruta clara de cara también a 2019. Parte de esa estrategia está basada en una feroz autocrítica respecto al PJ. "El peronismo está jodido, pasó a ser una expresión marginal", disparó el gobernador sin eludir que parte de esa responsabilidad se la endilga a la expresidente Cristina de Kirchner. "En 2013 fue nos mal en los grandes distritos y el perfil de los candidatos en las provincias no eran buenos porque estaban todos elegidos a dedo", lanzó.
Sin embargo, se mostró esperanzado de cara a las elecciones de medio término del próximo año. La ecuación es fácil, según Urtubey, el peronismo tuvo su peor elección en 2013 y Massa va a perder respecto a ese comicio. Pero sin dudas su mirada está puesta en 2019. "Voy a trabajar en la construcción de una alternativa superadora al Gobierno, si nos va bien, mejor", explicó aunque aclaró que "no necesariamente tengo que ser candidato, si lo soy es porque están dadas las condiciones para hacerlo".
Parte de esa refundación incluye a varios de sus colegas y deja atrás a figuras clásicas del peronismo o del cristinismo puro. "Hay una nueva dirigencia, un peronismo muy piola como Gustavo Bordet (Entre Rios), Domingo Peppo (Chaco) o Sergio Uñac (San Juan)", enumeró.
Más allá de la crisis del peronismo advierte que los líderes políticos hoy deberían preocuparse por abrir canales de participación ciudadana para que el electorado se sienta representado y escuchado. "El ciudadano del siglo XXI no se siente representado con una institucionalidad. Tenemos que empezar a escuchar a la gente y abrir canales de participación y dejar de ser una democracia exclusivamente representativa. Acá se cerraron todos los canales de participación ciudadana", señaló. Y reflexionó que "el primer peronismo de la Argentina a mitad del siglo pasado fue institucionalizar enormes mayorías que no tenían voz. El gran problema de la Argentina, entre otros, es el que está fuera del sistema, el laburante golondrina, el que labura en negro, el que está fuera de la cobertura".
Parte de esa falta de representividad que sufren los mismos sindicatos que representan al trabajador formal, pero hay otros sectores del trabajo injformal que no tienen interlocutores. "Hoy la bandera es el pago de ganancias, que no tiene nada que ver con muchos sectores. En rigor, no está mal porque representa a un sector hipreinstutcionalizado pero hay otro sector, un tercio, un cuarto de los argentinos que no tiene ninguna representación formal".
Respecto al kirchnerismo niega que este desaparecido, aunque cuestiona el poder real que pueda tener. "Me parece que el kirchnerismo desaparecido no está, un lugar de la sociedad van a ocupar, no un lugar de poder", asegura y vaticina que Cristina no va a ser finalmente candidata por la Provincia de Buenos Aires como se especula.
Un dato no menor es el factor económico. Coincide en que la actividad económica para las elecciones de 2017 va a estar mejor y que eso lo va a capitalizar fuertemente el oficialismo. "El escenario económico va a ser distinto, la inflación interanual para septiembre del año próximo va a estar en 12 o 15 %, vas a tener efectos del blanqueo, vas a tener una buena campaña agrícola, va a bajar la pobreza y todo eso te genera un buen clima" señala. En ese sentido, insiste en que "el peronismo está jodido. El peronismo pasó a ser una expresión marginal. La provincia más grande que ganamos es Tucumán", pero que también reconoce que es una oportunidad para cimentar hacia 2019. "Nuestra inteligencia será llegar a construir desde una buena oposición del gobierno, una instancia superadora que pueda decir "Che estos flacos pueden andar mejor que el Gobierno", remató.
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