El 60% de los industriales de PBA espera un año sin grandes cambios

Entidades del sector de la provincia desplegaron un relevamiento con foco en perspectivas y problemáticas. Señales de alerta y preocupación, pero también cautela en materia de decisiones.

mirada. A la hora de identificar los “principales problemas de la Argentina”, entre los industriales consultados la “carga impositiva” pica en punta con claridad, seguida por “la inflación” y “la legislación laboral”.

Un sondeo sobre cerca de 600 empresarios industriales bonaerenses desplegado por entidades del sector de cara a este 2022 detectó que 52,5% de los consultados cree que la situación económica general “empeorará”, aunque 60% piensa que el presente de su empresa “se mantendrá igual” y sólo un 22,5% que será peor.

Se trata del “Relevamiento de Percepción Industrial Bonaerense”, que disparó señales de alerta y preocupación de los empresarios pero también una posición cauta en materia de decisiones.

La iniciativa fue llevada adelante por la Federación Económica de la Provincia de Buenos Aires (FEBA), la Asociación de Industriales de la Provincia de Buenos Aires (ADIBA), la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires (UIPBA) y la Confederación Económica de la Provincia de Buenos Aires (CEPBA).

Con foco en detectar perspectivas y problemáticas identificadas para este año, registraron así durante las primeras semanas de enero la apreciación de ese lote de empresarios, que participan de esas entidades.

Según el relevamiento:

En materia de estimaciones de inflación 2022, un 62,5% de los encuestados prevé que será de entre el 46 y el 60%, mientras que para el 17,50% estará en entre el 31% y el 45%. La mirada es más negativa en el caso de un 15% de los consultados, que espera una inflación de más del 60%. Y sólo para un 5%, estará entre el 16% y el 30%.

En lo que respecta a perspectivas económicas e inversión, el presidente de CEPBA, Guillermo Siro, resaltó -como parte de un “resumen ejecutivo”- que “pese a que más de la mitad de los industriales relevados considera que la situación económica (general) empeorará en 2022 (52,5%), sólo un 22,5% considera que ello repercutirá directamente en la situación de su empresa”. “En cambio, un 60% prevé que el panorama económico (de la empresa) se mantendrá similar y un 17,5% piensa que mejorará”, agregó Siro, además de destacar que “esta tendencia va en línea con el crecimiento que ha tenido la medición interanual de la actividad industrial en los últimos meses”.

En esa línea, en el rubro “volumen de personal” un 75% de los encuestados afirma que mantendrá los niveles actuales y un 15% planea incrementarlo, mientras que sólo un 10% proyecta una reducción.

En el plano de inversiones proyectadas, la torta está dividida por mitades: el 50% planea invertir y el otro 50% no. Y en el primer caso, será una “pequeña inversión” en el 54,50% de los casos, una “mediana inversión” en el 31,80% de los consultados e “importante” en el 13,60%.

En “rentabilidad”, el 45% cree que “aumentará” y otro 45% que “se mantendrá igual”, mientras que para el 10% “se reducirá”.

Consultados sobre cuál creen que es “el origen de la crisis argentina”, un contundente 85% lo atribuye a factores “políticos”, y sólo un 15% a disparadores “socio-económicos”.

Y a la hora de identificar los “principales problemas de la Argentina”, la “carga impositiva” pica en punta con claridad, seguida por “la inflación” y “la legislación laboral”.

En cuanto a la brecha cambiaria, el 40% de los empresarios relevados cree que “aumentará”, mientras que para el 35% “se mantendrá igual” y, para el 25%, se “reducirá”.