Los productores priorizan la recolección de soja a la de maíz en la provincia de Buenos Aires. El temor a problemas climáticos y la posibilidad de mejores ganancias determinan esa actitud. Hubo rindes dispares en maíz.
Una serie de lluvias demoró nuevamente la recolección del maíz argentino de la campaña 2005/06 la semana pasada en amplias zonas productoras del país y los rendimientos son irregulares, informó ayer la Secretaría de Agricultura.
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Hasta el jueves pasado, los agricultores argentinos habían recolectado 26% del área cosechable de los 3,05 millones de hectáreas sembradas con maíz, sólo 3 puntos porcentuales por encima de la semana pasada y 23 puntos por detrás del ritmo del año pasado para esta fecha.
En Córdoba, la primera provincia productora del país, la excesiva cantidad de agua en los suelos «y el elevado contenido de humedad del grano como consecuencia de las lluvias ocurridas en la provincia, con importantes registros en el área centro-norte, impidieron un mayor avance en la trilla», dijo el gobierno.
Los rendimientos de la provincia alcanzan hasta el momento un promedio de 6,9 toneladas por hectárea.
En Buenos Aires, el segundo distrito productor de maíz, la cosecha avanzó lentamente en el Norte debido a que los agricultores priorizaron la recolección de la soja, mientras que los rendimientos son dispares, de acuerdo con el gobierno.
Por otro lado, en Santa Fe, tercera productora de maíz, la productividad promedio es de 6,6 toneladas por hectárea, pero osciló entre 2 y 13 toneladas por hectárea.
La Secretaría de Agricultura prevé que la producción de maíz para el ciclo 2005/06 alcance 13,8 millones de toneladas, por debajo del récord de 20,5 millones de toneladas de la última temporada.
En tanto, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por su sigla en inglés) estimó, por su parte, que la cosecha de maíz de la Argentina alcance 14 millones de toneladas.
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