6 de marzo 2013 - 23:48

Chávez, el crecimiento del deporte y Maradona

Maradona y Chávez, en 2010
Maradona y Chávez, en 2010
Hugo Chávez siempre creyó que el deporte era un instrumento fundamental para el crecimiento de la sociedad venezolana y por ello realizó grandes inversiones para desarrollar un sector que tenía más de 50 años de abandono. Durante su mandato, el crecimiento del fútbol llegó a niveles impensados a fines de los 90, se logró la segunda medalla de oro de Venezuela de la mano de Rubén Limardo (esgrima) y Pastor Maldonado llegó a conquistar un Gran Premio de Fórmula 1, como hitos más destacados.

El expresidente de Venezuela era un gran fanático del béisbol desde muy pequeño, al punto que soñaba con ser jugador profesional. Según cuentan, tenía grandes dotes y una proyección muy premonitoria, que de haberle dedicado más tiempo lo habría colocado dentro de un diamante. Sin embargo, su formación militar y su interés por la literatura latinoamericana lo llevaron por otros rumbos, hasta convertirse en uno de los líderes más importantes de la región.

Una vez que llegó al poder, Chávez comprendió que el deporte era una herramienta muy importante para lograr inclusión social y por ello comenzó a fomentarla. En 2006 creó el Ministerio del Poder Popular para el Deporte, el cual lleva adelante el plan nacional para restaurar clubes, instituciones y federaciones a lo largo de todo Venezuela, sustentado con un fondo nacional que se nutría a través del aporte de empresas. El objetivo es el de concienciar a la población acerca del derecho de la práctica de la educación física y actividades deportivas como parte de su desarrollo integral y el de transformar al país en una potencia deportiva a nivel continental.

Más allá de su pasión por el béisbol, sabía que debía enfocar sus esfuerzos en un deportes más global para lograr más resonancia internacional, por lo que el líder bolivariano enfocó su mirada en el fútbol, aprovechando que Venezuela sería la sede de la Copa América en 2007. Para dicho evento el gobierno invirtió 450 millones de dólares en la construcción de tres estadios nuevos y la remodelación de otros seis, además de fomentar al público a concurrir a los estadios poniendo las entradas a bajo costo y mucha veces regalándolas. El objetivo se cumplió con creces: además de una inyección de u$s 650 millones en la economía, la "Vinotinto" tomó otra fuerza, pasando de ser el peor equipo de Sudamérica a un férreo rival que se hace fuerte de local y da pelea de visitante. De hecho, en la actualidad batalla por la quinta plaza al Mundial de Brasil 2014 y en los últimos 14 años subió 65 posiciones en el ranking FIFA, para ubicarse en la posición 45.

Otro golpe de efecto fue el apoyo a Pastor Maldonado para su desembarco en la Fórmula 1, el cual generó mucha polémica en la oposición quien lo acusó de desviar fondos y le inició una causa penal. Por medio del patrocinio de la petrolera estatal PDVSA, el gobierno le paga al piloto de Williams u$s 65 millones anuales. Luego de destacadas actuaciones, el venezolano se quedó con el Gran Premio de España de 2012, siendo el primer bolivariano en lograrlo en la historia.

El otro gran hito del deporte venezolano bajo el gobierno de Chávez fue la obtención de una medalla de oro en Londres 2012, la segunda en la historia, lograda por Rubén Limardo. El deportista siempre se mostró a favor del líder bolivariano, apoyándolo abiertamente en las últimas elecciones argumentando que sin su soporte y dedicación nunca hubiera logrado la presea dorada en los Juegos Olímpicos.

Finalmente, no se puede dejar de destacar la amistad que mantenía con Maradona. Se conocieron en 2005 en el Tren del Alba camino a Mar del Plata y desde allí entablaron una fuerte relación. En 2010, luego de su renuncia a la Selección, fue a visitarlo a Venezuela y hasta se habló de incorporarlo a un proyecto para profundizar el desarrollando el fútbol en aquel país, pero todo quedó en la nada. La última vez que habló de él fue en marzo del año pasado cuando, consultado por la enfermedad del mandatario manifestó: "Lo amo, rezo por él todos los días, lo amo por encima de todas las cosas".

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