River tuvo su revancha en Mendoza
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Esto le permitió al conjunto orientado tácticamente por Carlos Ischia ejercer un claro dominio y llegar bastante seguido a la valla defendida por Juan Pablo Carrizo.
Y en una de esas llegadas, a los 16 minutos, Paletta logró la apertura del marcador con un cabezazo que ingresó cerca del palo derecho, luego de un tiro libre de Dátolo desde la izquierda.
Poco después, Palermo casi aumenta la diferencia con otro cabezazo que salió pegado al palo derecho.
Boca era más y lo reflejaba en el marcador.
Sin embargo River fue efectivo en los momentos clave, sobre todo cuando comenzó a gravitar el chileno Sánchez -la figura del ganador-, ya que de sus pies nació la igualdad conseguida por el colombiano Falcao García, en la segunda llegada del equipo de Núñez sobre la valla defendida por Migliore.
Y a los 33 minutos, cuando Boca continuaba mandando en el desarrollo, Ortega envió un centro desde la derecha, la pelota se desvió en el paraguayo Cáceres y le quedó a Abreu, quien definió entrando por el segundo palo, al derecho de Migliore.
Por entonces el resultado no tenía nada que ver con los méritos realizados por uno y otro equipo, pero River no dilapidó las chances que tuvo para anotar.
Cerca del final de la etapa, Alexis Sánchez realizó una gran maniobra personal en la que eludió a cuanto jugador de Boca le salió a la marca y ya dentro del área cayó cuando González punteó el balón.
Pezzotta cometió su primer error, sancionó un penal inexistente y expulsó al jugador uruguayo.
Esto no le importó a Ortega, que transformó en gol el tiro desde los doce pasos para colocar un impensado 3-1.
En el comienzo de la segunda etapa otro error de Pezzotta -sancionó una falta dentro del área de Ferrari a Palacio que no existió- y además del penal le mostró la tarjeta roja al marcador lateral derecho de River.
Palermo sacó provecho de esa contingencia y con un remate bajo y contra el palo izquierdo de Carrizo achicó a sólo un gol la diferencia.
A partir de ese momento, los dirigidos por Diego Simeone se retrasaron en la cancha, le cedieron el campo y la pelota a Boca, para tratar de sorprenderlo de contraataque.
Si bien es cierto que River generó alguna situación para ampliar la ventaja, también es verdad de que Boca terminó apretándolo contra su valla, de manera especial en los últimos cinco minutos, cuando Pezzotta ya había decretado también las expulsiones de Ponzio y Cabral por juego brusco.
De esta manera, River se quedó con la Copa Revancha, se vengó de la derrota sufrida en Mar del Plata ante su tradicional rival y además ganó el torneo Pentagonal de los Grandes.
Un buen comienzo de cara al torneo Clausura que se viene.
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