Crecen 20% cheques rechazados

Los cheques se están convirtiendo en un verdadero dolor de cabeza para muchos argentinos: en los primeros ocho meses del año se rechazaron 2.352.989 de valores, y empresas y trabajadores se ven obligados a incurrir en gastos judiciales para reclamar el pago o refinanciarlos a mayor plazo.

Los rechazos, en lo que va del año, crecieron 18,3% con respecto a iguales meses del año pasado, lo que no hace más que reflejar la gravedad de esta crisis que desde hace tiempo se siente con fuerza en la cadena de pagos.

Así se desprende del Banco Central de acuerdo con la información enviada hasta el momento por las entidades financieras. Si bien no es posible saber exactamente cuánto dinero hay involucrado, algunos cálculos muy preliminares sugieren que se habrían rechazado cheques por más de $ 3.000 millones en lo que va del año, en la mayoría de los casos por no tener fondos.

La cantidad millonaria de cheques rechazados no hace más que agudizar la crisis en la cadena de pagos, que se deteriora con el correr de los días en que la reactivación no se hace presente. La emisión de cheques sin fondos está alcanzando niveles récords: en los últimos años, el promedio de rechazo anual rondaba los 2,5 millones. Ahora esa cifra se alcanzó en sólo 8 meses. Así, mediante estos instrumentos sin fondos, empresas en crisis o trabajadores de escasos recursos terminan financiando a otras empresas en crisis o consumidores sin resto.

• Devoluciones

«En los últimos meses se nos cayeron entre 7% y 8% de los cheques. Algunos clientes nos avisan antes que no tienen fondos, otros no», explicó Mariano Sardans, de la consultora FDI Consulting. «Muchos de nuestros clientes están atravesando una situación más difícil todavía, y en general las empresas terminan devolviendo los cheques a sus emisores, que les emiten nuevos cheques a más largo plazo. En definitiva terminás refinanciando el pago a más plazo del que ya se está dando», explicó Sardans.

El nivel más alto de rechazos en el año se dio en mayo: los bancos rebotaron 332.102 cheques, 14% más que los rebotes realizados en mayo de 2000, cuando el Banco Central registró 291.209 rechazos. En estas cifras incidió que a fin de año se emitió una gran cantidad de cheques a cobrar entre mayo y junio, pero con la caída en las ventas de fin de año, las empresas se quedaron sin margen para cubrirlos.

No hubo un solo mes en el año en que la cantidad de cheques rechazados no supere a la de igual mes del año pasado. En agosto se rechazaron 294.666 cheques, 2,6% más que en agosto de 2000. Sin embargo, a pesar de que el nivel de crecimiento interanual del último mes fue menos acentuado que en meses anteriores, para algunas empresas la situación fue igualmente dramática: «Nunca como en agosto me rebotaron tantos cheques. Pero no me queda otra opción que seguir aceptándolos. No sé hasta cuándo voy a aguantar en este ritmo», explicó un proveedor de materiales para la construcción.

Desde marzo del año pasado, el Banco Central dispuso bajar la rigurosidad de sus exigencias y estableció una flexibilización para los cierres de cuentas llevando a cero el contador de cheques rechazados y permitiendo en los siguientes 15 días de producido el rechazo del quinto cheque, cancelar la obligación y volver al sistema como rehabilitado. Con esto, se buscaba fomentar el uso de la cuenta corriente bancaria y ayudar a superar la recesión.

• Potestad

En marzo de este año, Domingo Cavallo terminó con la potestad del Banco Central para el cierre de cuentas corrientes y dejó la determinación de los cierres de cuentas en manos de las entidades bancarias que, de esta forma, retoman la función sobre la base del comportamiento registrado por cada cliente. Con esta medida, Cavallo buscaba reintegrar al sistema a unas 400.000 personas que tenían sus cuentas corrientes cerradas y rehabilitar la cadena de pagos.

Pero hasta el momento, si bien los bancos han flexibilizado la normativa, la cadena de pagos, lejos de rehabilitarse, está cada día más resentida. Emitir cheques a 180 días se ha convertido en algo común para las empresas, y enterarse a los 180 días de que el dinero no podrá cobrarse también es un proceso que ya no sorprende a quienes no tienen más opciones que continuar aceptando estos valores, aun dudando de su solvencia. En la base de datos del Banco Central se puede acceder a la información desagregada por empresa de la cantidad de cheques rechazados y su monto. Una rápida mirada permite encontrar titulares de cuentas que acumulan decenas de cheques sin fondos por miles de pesos.