Duhaldismo crítico esmeriló a Kirchner
Néstor Kirchner salió debilitado, a pesar de que consiguió la prórroga de la emergencia, en el Senado. La votación, que dejó fisurado el bloque PJ y alejó a transversales, resultó favorable gracias a ausencias y abstenciones de duhaldistas críticos y otras tribus no kirchneristas, que podrían haber hecho fracasar el proyecto.
-
Impuesto a las Ganancias: ARCA postergó la presentación de la declaración jurada y del pago
-
La economía aceleró su recuperación en el inicio del 2025: el PBI creció 5,8% anual durante el primer trimestre

Se inclinaron por la negativa todos los radicales que estaban en sus bancas -incluidos los disidentes, Rodolfo Terragno y el rionegrino Luis Falcó-, más los provinciales de pelaje variado (desde el neuquino Pedro Salvatori -denunció que el Ejecutivo pretendía que le firmaran un «chequeen blanco»-, pasando por el salteño Ricardo Gómez Diez, los bussistas y la sanjuanina Nancy Avelín, de Cruzada Renovadora) y, demás está señalarlo, Giustiniani. Resultó sorprendente que pegara el salto la adolfista Liliana Negre de Alonso, que forma parte de la escudería oficialista.
Cristina de Kirchner, que permaneció en Estados Unidos (para que no le recordaran que ella se había opuesto a esta misma ley, cuando la pidió Eduardo Duhalde en 2002), evitó el papelón de verse envuelta en una polémica: ratificar su voto del año pasado -también se abstuvo-, o inclinarse por el sufragio negativo, lo cual la hubiera encumbrado como la «principal oposición» a su marido.
No participaron del plenario, por distintos motivos, los radicales Mónica Arancio de Beller (Jujuy) y la formoseña Marcela Lescano; los peronistas María Elisa Castro (Santiago del Estero), el sanjuanino Luis Martinazzo y Ramón Saadi ( Catamarca); y Luz Sapag (MPNNeuquén). Parafraseando al escritor Macedonio Fernández, «había tanta, pero tanta gente, que si llegaba a faltar uno más, no entraban».
Hasta los «transversales» se fracturaron a la hora de manifestarse. En sintonía con Cristina de Kirchner modelo 2002, la mayoría dijo no. Figuraron allí Vilma Ibarra (Frente Grande) y el juecista cordobés Carlos Rossi. Fiel a Juan Pablo Cafiero, a Felipe Solá y al kirchnerismo de Casa Rosada, Diana Conti volvió a alinearse detrás del PEN.
En definitiva, con 3 abstenciones y 7 ausencias -hubiera sido suficiente con 5 de ellas-, que se transformaran en oposición hubiera fracasado la ley que pedía el gobierno.
Dejá tu comentario