9 de septiembre 2008 - 00:00

Empleo del mes

Ser hoy trabajador mecánico en la Argentina es tener el mejor empleo. Con un salario inicial de cerca de $ 5.000 pesos, encabezan el ranking de los operarios mejor pagos. Incluso ya superan en dólares los ingresos de la convertibilidad. Pero esto no es todo: el gremio de SMATA está pidiendo ahora un ajuste de 50% para los empleados de las concesionarias de autos. De esta manera, quiere fijar la pauta para comenzar a negociar con las fábricas hacia fin de año.

José Rodríguez
José Rodríguez
Alentado por el buen momento que vive el sector automotor, el gremio de SMATA otra vez quiere liderar el ranking de reclamos salariales. Así se lo hicieron saber los mecánicos a la Asociación que agrupa a las concesionarias (ACARA) cuando sorpresivamente reclamaron un ajuste de 50% para los sueldos básicos de convenio y endurecieron su posición con amenaza de paro.

De esta manera, el gremio conducido por José Rodríguez quiere marcar el terreno para las próximas negociaciones con las terminales automotrices que comenzarán en los próximos meses. También se cree que ante la intención del gobierno de congelar las paritarias en 2009, el gremio busca obtener el mayor ajuste posible antes de que entre en vigencia la veda oficial.

La negociación promete alcanzar niveles de tensión mañana, cuando los representantes del sector empresario se vuelvan a reunir con los delegados gremiales para seguir pulseando por el ajuste que recibirán los trabajadores de las concesionarias que están afiliados al SMATA.

La suposición que hacen los ejecutivos de la inminencia de una dura negociación tiene su explicación: en los últimos días, el gremio mecánico ya había enviado señales de que sus pretensiones serían defendidas con uñas y dientes. Por ejemplo, en las principales concesionarias se vienen realizandodesde la semana pasada asambleas del personal que en algunos casos duran más de tres horas. Para los empresarios, la duración de esas reuniones ya dejan de tener el objetivo de un debate gremial y se parecen más a un mecanismo de presión.

  • Paro encubierto

    «Una cosa es una asamblea cada tanto y durante un tiempo razonable. Pero si se hace todos los días, dura tres horas o más y se eligen los momentos de mayor actividad, eso tiene más las características de un paro encubierto», se quejó el dueño de una concesionariaporteña. Pero no sólo las presiones apelan a las sutilezas. También los empresarios denuncian que en algunos casos recibieron amenazas sindicales de bloquear las puertas de las concesionarias para impedir el ingreso del público, copiando un estilo impuesto por Hugo Moyano.

    La negociación por el ajuste salarial comenzó los primeros días de agosto, pero previo a esto ACARA había acordado con el SMATA, durante el primer semestre del año, una suba de 10% a cuenta de futuros aumentos para lograr un buen clima de convivencia con el gremio.

    Sin embargo, la estrategia no dio resultados y los empresarios se enfrentan a un serio conflicto. Por ese motivo, ACARA envió ayer una nota al Ministerio de Trabajo alertando la situación que se avecina.

    «Durante una reunión, el SMATA solicitó el 50% de incremento sobre los básicos de convenio, el cual es imposible de otorgar ya que ACARA debe acordar un salario a nivel nacional con las delegaciones de 24 provincias y, por ende, con mercados muy distintos», dice el comunicado.
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