• El dólar cerró sin cambios respecto de la cotización de la jornada anterior, a $ 2,92 para la venta. Pero fue necesaria una fuerte intervención por parte del Banco Central y del Banco Nación para evitar que caiga un escalón. La autoridad monetaria adquirió u$s 30 millones y la institución que preside Felisa Miceli otros u$s 35 millones.
El contenido al que quiere acceder es exclusivo para suscriptores.
• Hubo un importante salto en la liquidación de los exportadores de cereales, que ingresaron u$s 62 millones. La cifra de ingreso de divisas por parte de este grupo de empresas tenderá a ubicarse en estos niveles en las próximas semanas, ya que se está en plena cosecha gruesa. Por eso ayer hubo presión bajista para la divisa, que sólo fue controlada al final del día.
• En este ambiente, el rango para la variación del dólar es mínimo y se ubica entre $ 2,90 y $ 2,95. El gobierno no quiere que caiga, con el objetivo de mantener la competitividad de la industria. Al menos éste es el argumento que esgrimen Roberto Lavagna y Néstor Kirchner. Por encima de estos valores, por el momento tampoco hay margen ya que las compras del BCRA están limitadas por un exigente programa monetario.
• Pese a que el Central está emitiendo más dinero para comprar dólares, por el otro lado incrementa la absorción para evitar picos inflacionarios debido a un incremento desmedido en la cantidad de plata que hay en poder del público. En la licitación de Lebac de ayer, por ejemplo absorbió más de $ 500 millones netos.
• El Central continuó con su política de incrementar la tasa de interés para absorber fondos y enviar una señal al sistema financiero. Ayer volvió a incrementar la tasa para los plazos cortos. La de 30 días ya se ubica en 4,20% anual. Ante esta política de aumentos de los rendimientos de corto plazo, los bancos buscan realizar colocaciones cortas para aprovechar futuros incrementos. El negocio parece prácticamente asegurado, ya que por otra parte el dólar está quieto.
• Esta semana habrá un paso adicional para absorber dinero de la plaza local, ya que mañana se realizará una nueva licitación para que los bancos cancelen redescuentos anticipadamente. Implicará quitar del mercado unos $ 700 millones adicionales.
• El mercado de bonos reflejó la mayor tranquilidad entre los inversores locales, luego del acercamiento que se produjo entre el gobierno argentino y el FMI. Ahora resta que la Justicia neoyorquina falle favorablemente el próximo 27 de abril y destrabe el canje para terminar de aquietar las aguas, al menos en lo que respecta a factores internos.
• Los bonos en pesos que ajustan por CER tuvieron recuperaciones de hasta 2% luego de varias jornadas de caídas consecutivas. El más beneficiado por el rebote fue el BOCON PRO12, que subió 1,89%, mientras que el BOGAR 2018 ganó 1,05% y el PRE8 registró una ganancia de 1,43%. Los bonos en dólares también subieron, aunque de manera más leve, con ganancias promedio de 0,5%.
Dejá tu comentario