La decisión de Mirgor de no renovar contratos de 745 operarios en su planta de Tierra del Fuego había planteado un escenario similar al que se abrió el lunes cuando Techint amagó despedir a 1.450 empleados de su empresa constructora. En ese caso, intervino el Gobierno y la empresa dio marcha atrás. Ahora, con la ensambladora de artículos electrónicos en Río Grande, la situación tomó otro curso: se llegó a un acuerdo entre el gremio, la empresa y el Gobierno fueguino para mantener los puestos de trabajo, pero condicionado a medidas que debe adoptar el Gobierno nacional. Son al margen del decreto conocido ayer que frena por 60 días todos los despidos en el país.
Mirgor: acuerdo condicionado para evitar los 745 despidos
Sólo 220 operarios van a cobrar hasta fin de abril. El resto volverá gradualmente si la fabricación de celulares es reabierta.
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objetivo. Mirgor quiere que la fabricación de celulares sea “esencial”.
El principio de acuerdo al que llegó la firma, propiedad de la familia del empresario Nicolás Caputo (que se hizo conocido por ser amigo íntimo de Mauricio Macri) con la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) involucra a 525 operarios contratados bajo la modalidad de “plazo fijo” y a 220 vinculados mediante contratos PPD (Personal de Prestación Discontinua) a quienes la empresa asume emplear al menos cuatro meses al año.
“El CEO de Mirgor, José Alonso, se comprometió a mantener los contratos PPD hasta finales de abril, pagando el 100% de los haberes. En relación a los demás contratados, la empresa propone una reincorporación paulatina si se aprueba un protocolo especial para producir celulares durante la cuarentena”, explicó a la agencia Télam el ministro de Trabajo de la provincia, Marcelo Romero.
En esa línea, el funcionario reveló que la idea de Mirgor es lograr que el Gobierno nacional declare como “productos esenciales” a la fabricación de teléfonos celulares y televisores, y que el Gobierno de la provincia autorice esa producción en el marco de un protocolo de cuidados sanitarios.
“En esas condiciones, iría tomando a los trabajadores cuyos contratos se vencieron. Nuestra postura fue que el protocolo debe ser avalado por el Comité Operativo de Emergencia que formó la provincia para enfrentar la crisis del coronavirus”, afirmó Romero.
Según el ministro, la otra posibilidad es que el Gobierno nacional levante la cuarentena para la producción industrial (o un sector de ella) a partir del 13 de abril, lo que también permitiría el cumplimiento del acuerdo.
“Estos fueron los términos de una reunión que mantuvimos ayer en Río Grande, con la participación del secretario general de la UOM, Oscar Martínez, y el CEO de la empresa que participó en forma telefónica”, completó el ministro.
También dijo que las partes quedaron en “contacto permanente” para “avanzar en las tratativas y evitar los despidos en medio de la crisis sanitaria”.
La solución intermedia a la que se llegó en este caso evitó una polémica de tenor político como había pasado con Techint, empresa a la cual el presidente Alberto Fernández tildó de “miserable” a través de Twitter. Luego la disputa escaló a través de los medios, hasta que desde la empresa de la familia Rocca prefirieron bajarle el tono y acatar la conciliación obligatoria que dictó Trabajo.
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