El terceto habitual para las referencias de nuestra plaza desarrolló un «octubre verde» y de singulares ribetes. Ya que nuestro indicador ponderado clásico, Merval, y el de la Bolsa de Nueva York se unieron -al menos, en esto- para derrotar fantasmas del décimo mes y reportar un excelente más de 10% de incremento. Muy bueno para los dos, uno porque tenía que resurgir de entre escándalos empresarios y una caída sin freno del Dow Jones. El de aquí, que se revalúo en virtud de un nivel del dólar que marcó retrocesos y permitió a las acciones ser lo mejor, pero más... ¡en dólares!
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Finalmente, el que los pasó por encima a los dos, el índice que sigue la Bolsa de San Pablo y clausurando casi con 18 por ciento.
La rueda final no fue contundente, pero sí positiva. Levantó ciertas zonas de dudas y de tomas de utilidades, si bien no enjugó el retroceder fuerte de algunas fechas, pero sirvió para dejar la imagen favorable y sumar casi 1%, para alcanzar a coronar 10% mensual. Mucho más subió el índice Burcap, con 2,6%, virtud de Repsol y 5% de alza, contando con el máximo porcentual en 9% de Celulosa.
Respecto del volumen, con $ 42 millones de total, unos $ 32 millones siguieron curso de «certificados», quedando una magra cifra para acciones, que no pasaron de $ 10 millones. En el paisaje extendido hay notorias diferencias, porque en el Merval se lleva casi 47%, pero Burcap sube 80% y el de la Bolsa es un intermedio con 66%. Producto de volatilidades.
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