Para colegios privados, el aumento salarial de docentes debería ser del 23%

Los docentes privados no recibieron de parte de los establecimientos, sus sueldos de abril.

Las negociaciones paritarias docentes, como todos los años, abre una incógnita sobre si las clases comenzarán el 6 de marzo, tal como estaba previsto. Es que, el gobierno nacional apunta a imponer un tope del 18%, mientras que los trabajadores exigen que la suba ronde el 35%.

Sobre este debate, el secretario general Asociación de Entidades Educativas Privadas Argentinas (Adeepra), Perpetuo Lentijo, señaló que "el incremento salarial debería buscarse en un porcentaje intermedio, en el 23% promedio" porque "tanto los gobiernos como los docentes tienen que moverse de su postura y negociar con buena voluntad para buscar una alternativa intermedia".

Para Lentijo, "los docentes habían tenido el año pasado un incremento que estuvo por encima de la inflación, pero de todos modos una actualización salarial es necesaria. Asimismo, pareciera que la propuesta del gobierno no cubre la expectativa inflacionaria de este año".

El directivo explicó que, si la suba se fija en torno al 23%, repercutiría en una alza del 20% en las cuotas de los colegios privados, considerando que los salarios representan casi el 80% del costo laboral. Ésa es la expectativa pero no significa que las jurisdicciones vayan a otorgar esa suba".

Lentijo lamentó que en la actualización de las cuotas "sólo se tiene en cuenta el incremento salarial pero no las tarifas de servicios y los precios de otros insumos como librería o material tecnológico, que han tenido una suba notable".

A raíz de esto, el secretario general de Aeepra estimó que los establecimientos deberán hacer una "administración más eficiente de sus recursos" por lo que "se prevé que no hayan nuevas incorporaciones de personal no docente, aunque se descarta por el momento que se produzcan despidos".

Consultado por el nivel de matriculación en medio de la pérdida de poder adquisitivo de muchas familias, el secretario destacó que "no se reflejó" en las inscripciones porque "hay una valoración de lo que significa el colegio privado y prefieren recortar en otros gastos. Lo que sí puede pasar es que haya un corrimiento hacia instituciones con cuotas más accesibles".

Lentijo se mostró de acuerdo con la decisión del gobierno bonaerense de fijar topes mínimos y máximos al valor de las cuotas que cobran los colegios privados, que están relacionados con el nivel de subsidios que recibe cada institución educativa. "Esto permite que haya colegios privados para todos los sectores económicos", dijo.

El reclamo de los colegios privados es "el atraso que tienen algunas jurisdicciones" con respecto a la consideración de nuevos docentes para el cobro de esos subsidios.

"La Ciudad paga ese beneficio a todos los colegios, mientras que la provincia de Buenos Aires hay establecimientos que tienen medio plantel docente sin subvención, pese a que la demanda de matrícula es mucho mayor", afirmó.