En lo que queda del año, el Gobierno deberá aplicar un recorte del 14% en las partidas de gasto no automático para compensar el mayor costo fiscal que implican el proyecto de ley de emergencia por discapacidad, la distribución de fondos de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y el reparto del Impuesto a los Combustibles. Así lo señala un informe del Instituto de Investigaciones Económicas para la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL), que advierte que, sin ese ajuste adicional, el equilibrio de las cuentas públicas quedará bajo presión y, por ende, se incumplirá la meta fiscal con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Para cumplir con el FMI, Luis Caputo debería aplicar ajuste del 14% si el Congreso aprueba leyes que suben el gasto
El IERAL plantea que ante un incremento del gasto imprevisto por el Gobierno todavía tiene espacio para más ajuste en el presupuesto. Salarios, transferencias discrecionales y subsidios en la mira.
-
Inflación: a la espera del dato de agosto, prevén aceleración en septiembre por la volatilidad del dólar
-
La inflación de los trabajadores se desaceleró al 1,6% en agosto, pero advierten por caída de ingresos reales

Los proyectos del Congreso le suman presión al presupuesto.
El reporte por los responsables de la sección Fiscal del IERAL, Marcelo Capello y Federico Beich, plantea una proyección respecto del escenario base para este año. El mismo ya preveía un ajuste de 12%, debido al incremento que generó la inflación en las partidas del presupuesto que se ajusta por IPC.
“Dada la inflación esperada para los últimos cinco meses del año, se proyecta una suba del gasto automático del 15% anual real en ese lapso, de modo que para cumplir el compromiso con el FMI de un superávit primario de 1,6% del PBI en 2025, el gasto no automático debería tener una caída del 12% anual real entre agosto y diciembre de 2025, respecto de igual periodo del año pasado”, estima el reporte.
El trabajo indica que “teniendo en cuenta la nueva ley sobre discapacidad, y si se aprueban los proyectos de ley sobre ATN e impuesto a los combustibles, con un costo de cerca de 0,2% del PIB en lo que resta de 2025, para alcanzar el objetivo de un superávit primario del 1,6% del PIB, las erogaciones no automáticas deberían recortarse aún más, en torno al 14% anual real entre agosto y diciembre (en lugar de un 12% con el escenario base)”.
Es decir, el Gobierno tendría que hacer un ajuste 2 puntos en el gasto por sobre lo que estaba previsto.
El trabajo del IERAL indica, por otro lado, que “si bien el gasto primario exhibe una suba real anual del 2,4% en los primeros siete meses de 2025, aún resulta un 29% inferior al del mismo período de 2023”.
El gasto en Personal, señala el relevamiento “también en 2025 muestra una reducción (-6%), donde impacta la reducción de la planta, además de la evolución salarial, con lo que la partida de personal acumula un ajuste del 24% con respecto al año 2023”.
“En cambio, otros gastos de funcionamiento suben 28% real anual en lo que va de 2025, de modo que el ajuste con respecto a 2023 resulta del 18%”, dice el estudio.
De todos modos, el IERAL indica que “el gasto en jubilaciones aumenta un 20% anual real en enero – julio 2025, pero aún resulta 10% inferior a lo erogado en 2023”.
“El gasto en AUH sube 33% en lo que va del 2025 y acumula un incremento del 55% real anual versus igual período de 2023”, detalla el reporte.
Por otro lado, los subsidios a la energía bajaron 56% en los primeros siete meses del año y 7% respecto del 2023, mientras que las transferencias a empresas públicas bajan 45% respecto del 2024 y 64% con relación al 2023.
Las transferencias discrecionales a las provincias, por otro lado, este año están subiendo básicamente porque en 2024 casi no hubo.
Dejá tu comentario