La constructora Techint y la italiana Saipem acordaron con Profértil abrir un período de exclusividad hasta el 30 de junio. Este lapso les permitirá adecuar algunas condiciones del contrato que firmarán próximamente para ampliar la planta de urea ubicada en Bahía Blanca.
Profértil y Techint revisan el contrato para ampliar la planta de urea en Bahía Blanca
Abrieron un paréntesis para incluir soluciones tecnológicas que permitan reducir la huella de carbono. La inversión prevista originalmente para las obras asciende a u$s1.200 millones.
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Una alianza entre Techint y Saipem ganó la licitación internacional para encargarse de esas obras, que demandarán una inversión prevista de u$s1.200 millones.
Sin embargo, antes de poner la firma en el contrato definitivo, Profértil (empresa controlada en partes iguales por YPF y la canadiense Nutrien) quiere introducir cambios al proyecto para incorporar la tecnología danesa SynCOR, que reduce la huella de carbono del proceso industrial. Esta modificación y otros cambios fueron impulsados a pedido de Nutrien.
La licitación internacional para ampliar la planta de urea de Profértil en el puerto de Bahía Blanca se lanzó en agosto de 2019, con el objetivo de seleccionar la mejor propuesta tecnológica y de ingeniería para llevar adelante el proyecto.
Finalmente, hacia fines de 2021 Profértil se decidió por la propuesta de Techint-Saimpem, que así relegó al otro competidor AESA, empresa de soluciones para el mercado energético controlada por YPF, que participó asociada con la firma Technip.
Techint y Saipem (subsidiaria de ENI y continuadora de Snam Montaggi) integraron la UTE que construyó la planta de urea de Profértil en 2001 y la amplió en 2005. La ampliación de la planta apunta a duplicar la capacidad instalada, actualmente en torno de 1,3 millones de toneladas anuales de urea (unas 4000 t/día). La planta consume 2,5 millones de metros cúbicos de gas por día. Además, las nuevas obras redundarían en la creación de más de 1500 puestos de trabajo, entre directos e indirectos, calculan las empresas.
Pero Profértil le comunicó a los ganadores que deseaba introducir una serie de cambios significativos en el proyecto técnico que no estaban en el pliego inicial y por eso el contrato para la ejecución del proyecto todavía no se firmó, según indicó el portal EconoJournal citando fuentes del mercado energético.
Mientras buscan ponerse de acuerdo para ésa y otras instancias de revisión, las partes abrieron un paréntesis hasta el 30 de junio. En tanto, desde Profértil señalaron que “formalmente, el proceso licitatorio sigue abierto dado que aún no se concretó la adjudicación”, según indicó el portal especializado.
Nutrien consideró necesario incorporar al pliego de condiciones original la aplicación de la tecnología SynCOR para realizar la producción de gas de síntesis de una manera más sustentable. Dicha tecnología pertenece a Haldor Topsoe, una empresa especializada en tecnologías de reducción de carbono, fundada en 1940 en Dinamarca .
Entre las ventajas que aporta la tecnología SynCOR se destaca que deja una menor huella de CO2 y consume menos agua en comparación con las tecnologías tradicionales con licencia. Además permite maximizar la producción reduciendo los costos operativos.
La preocupación de Profértil por avanzar hacia un esquema de producción sustentable no es nueva. Desde 2020 pasado más del 60% de la energía que consume en su planta de Bahía Blanca proviene de fuentes renovables, como el parque de energía eólica Los Teros, ubicado cerca de Azul, en la provincia de Buenos Aires.
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