El presidente Néstor Kirchner y el ministro de Economía, Roberto Lavagna.
Roberto Lavagna insistió el viernes pasado en que este año la economía crecerá 6%. Pareciera ser una buena noticia, pero no lo es. Estaría anunciando la recesión.
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En los primeros seis meses creció bastante la economía, a un ritmo de 8,4% interanual. Y para que en todo el año sea de 6%, en el tercer trimestre la actividad debe caer 1,5% en comparación con junio, y además en el cuarto trimestre debería caer otro 1,5% contra lo sucedido entre julio y setiembre.
Por eso el consenso de los economistas del mercado, relevados por el Banco Central (REM), contempla un crecimiento mucho mayor al que estima el ministro, y que es de 7,3%. Pero sucede que a Lavagna siempre le agrada subestimar los datos de la economía, para intentar sorprender luego con cambios positivos. El ministro vive todavía del rebote de la economía argentina. ¿Le durará?
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