Trenes: avanza plan de estatización parcial
Avanzó el gobierno con su plan para intentar una solución a la crisis en trenes de pasajeros. Néstor Kirchner firmó ayer el proyecto para crear dos nuevas empresas estatales y lo envió al Senado, apurado por mostrar avances antes de la elección del domingo en un tema que perjudicó a bonaerenses, pero conmovió también a porteños. Se creará un ente encargado de controlar todos los ramales, con poderes que ninguna empresa pública del sector tuvo hasta ahora: administrará fondos, subsidios y cientos de inmuebles que se le asignarán. Será la única autoridad para decidir sobre inversiones que superan los $ 6.000 millones. En realidad, es también otro avance más hacia la estatización del sistema de ferrocarriles que se inició cuando el gobierno quitó las concesiones de tres ramales en medio de una crisis. Otra empresa estatal, que también se crea, podrá asociarse a privados o gestionar trenes. Todo el control quedará en manos del Ministerio de Planificación Federal, que tendrá poder para decidir desde las inversiones a realizar hasta el despido de empleados.
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El presidente Néstor Kirchner analizó en Casa de Gobierno el proyecto de reestructuración
del sistema ferroviario antes de firmarlo para enviarlo al Congreso.
La crisis del sistema ferroviario derivó en los recientes hechos de violencia en la estación de Constitución desde donde sale el Ferrocarril Roca, aunque antes también hubo graves incidentes, con incendios y detenciones, en la terminal de Once y en la estación de Haedo, operadas por la compañía TBA.
Las deficiencias e irregularidades llevaron al gobierno a quitarle la concesión al grupo Metropolitano, encabezado por el empresario Sergio Tasselli-, de las líneas Roca y Belgrano Sur. Antes, en 2005 el Ejecutivo rescindió otro contrato, el del San Martín, que operaba el mismo concesionario.
De Vido dijo que con el proyecto el Estado nacional « asume la responsabilidad de darle solidez al servicio ferroviario, para que favorezca a la gente y al sector productivo».
Agregó que la iniciativa que «no consiste en estatizar el sistema, ya que se mantendrán los esquemas de concesiones, mientras se cumplan los contratos».
También explicó que la intención es «poner por encima de los ferrocarriles una administración que pueda planificar y administrar los recursos». Los entes a crear se denominarán Administración de Infraestructura Ferroviaria Sociedad del Estado y Operadora Red Ferroviaria Sociedad del Estado.
Esta última unidad tendrá a su cargo el control del servicio y podrá asociarse con terceros privados, aunque siempre bajo el «paraguas del Estado», aclaró De Vido.
«Esta sociedad asumirá por sí o por intermedio de terceros o asociada a terceros, la prestación de los servicios ferroviarios de pasajeros o de carga que se le asignen, los que se encuentren concesionados y que por distintas causales reviertan al Estado Nacional», indicó De Vido.
El ministro puntualizó que estos organismos tendrán una función similar al «modelo» que se aplica en los ferrocarriles de España a través de un organismo llamado Renfe.
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