‘‘Así como estoy, no puedo competir’’

El «Rey David» sufre una lesión parecida a la que padecieron los ex número uno Gustavo Kuerten y Lleyton Hewitt. ¿Zafará del bisturí?

Finalmente, David Nalbandian reconoció la gravedad de su lesión en la cadera izquierda. La prematura eliminación en la primera ronda de Estoril, a manos del chileno Paul Capdeville, número 91 del ranking, en sólo 53 minutos, fue un signo inequívoco de que el estado físico del cordobés no era óptimo. La ruptura del labrum, una especie de menisco de la cadera, le puso punto final a su andar por tierras portuguesas.

Sin embargo, lo peor puede estar por venir. Es que la segunda raqueta del tenis criollo decidirá este fin de semana si se interviene quirúrgicamente. En declaraciones televisivas, el cordobés explicó algunos pormenores de la lesión y aclaró que su idea es evitar una operación. «Hoy por hoy, estamos tratando de zafar de la cirugía, pero sigo con molestias. Me estoy dando las últimas oportunidades», comentó Nalbandian. Y agregó: «Voy a esperar hasta el fin de semana para analizar si debo operarme o no. Si no mejoro, no tendré otra alternativa».

Su estado atlético preocupa a propios y extraños. «Así como estoy, no puedo jugar ni un Grand Slam ni la Copa Davis. No estoy para competir en el mejor nivel. No puedo disputar cinco sets. Me duele para estar sentado, para manejar, camino rengo. Durante el partido me molesta, especialmente cuando tengo que sacar. Y al otro día el dolor es insoportable. No puedo seguir así porque no rindo, no estoy cómodo», explicó el número 19 del ranking.

Tal vez, al que más le preocupe lo de Nalbandian sea al capitán argentino de Copa Davis, Modesto Vázquez, a quien a raíz de la lesión del cordobés se le presenta un panorama más que sombrío de cara a la serie de cuartos, ante República Checa. «Con Ricardo (Rivera, el subcapitán) no nos queremos apresurar. Preferimos aguardar por la decisión que tome David. Si bien no está en las mejores condiciones, es un jugador clave para la Argentina», expresó Tito. Para colmo, desde Munich llegaron malas noticias para el capitán. Es que tampoco podría contar con Martín Vassallo Argüello, quien se retiró por una lesión en la espalda en el partido ante el alemán Denis Gremelmayr. Un verdadero rompecabezas tendrá que armar Vázquez para el choque con los checos. Sólo Juan Martín Del Potro y Juan Mónaco son números puestos. El resto del equipo es una incógnita.