6 de mayo 2009 - 00:00

Denuncian que son trucadas las fotos de la coartada de Berlusconi

Silvio Berlusconi se defendió anoche en la RAI de las acusaciones de infidelidad que le lanzó su esposa, Veronica Lario. La imagen de la mujer atormentaba al premier desde una pantalla gigante (arriba). Silvio Berlusconi posa junto a Noemi Letizia y los padres de ésta en el cumpleaños número 18 de la joven. Algunos dicen que la foto está trucada (abajo).
Silvio Berlusconi se defendió anoche en la RAI de las acusaciones de infidelidad que le lanzó su esposa, Veronica Lario. La imagen de la mujer atormentaba al premier desde una pantalla gigante (arriba). Silvio Berlusconi posa junto a Noemi Letizia y los padres de ésta en el cumpleaños número 18 de la joven. Algunos dicen que la foto está trucada (abajo).
Roma - El primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, se disponía a publicar en su revista Chi las fotos de la fiesta de la adolescente Noemi Letizia, con la esperanza de aclarar de ese modo que, habiéndose tratado de un evento social, no pudo tener ningún contacto íntimo con ella. Sin embargo, el diario Corriere della Sera se le adelantó y publicó ayer las imágenes, lo que desató una inmediata polémica acerca de si las fotos están trucadas para salvar a «Il Cavaliere».

En medio de un fárrago de escandalosas declaraciones del polémico premier, de su ofendida esposa, Veronica Lario, y hasta del padre de Noemi, la controversia quedó servida. En la primera de las fotografías se puede ve a Berlusconi junto a Noemi Letizia y los padres de ella. Según varios expertos, están «silueteados», aunque también se cree que la sensación podría deberse a la baja calidad de las imágenes. En otras, «Il Cavaliere» parece directamente insertado en la imagen a la fuerza.

La importancia de estas fotografías radica en que son la única prueba que tiene Berlusconi, de 72 años, para demostrar que en la fiesta no ocurrió nada indebido, consignó ayer el diario español El Mundo en su edición de internet.

«¿Por qué creen que me iba a fotografiar con los camareros, los familiares, los amigos y los cocineros? Aquel día me llamó el padre (de la joven), un amigo mío de hace muchos años, para que acudiera. Como estaba cerca, pasé un par de minutos», declaró Berlusconi.

Berlusconi hizo estas declaraciones en el programa «Porta a Porta» que se emitió anoche en el canal de la televisión pública italiana RAI 1.

El premier agregó que fue a Nápoles «con antelación para una reunión política que tenía por la tarde, y cuando el padre de Noemi me dijo que estaban festejando el cumpleaños de su hija y que el restorán estaba a sólo tres minutos del aeropuerto de Capodichino, lo verifiqué y, como tenía una hora libre, fui».

«Llegué -prosiguió- con ocho automóviles, entre Policía y escolta, y al entrar enseguida me empezaron a aplaudir. Frente a toda esa gente, no pude dejar de hacer campaña electoral y comencé a sacarme fotos con todos los que estaban, desde los familiares hasta los dueños del restorán».

Berlusconi se preguntó: «¿Cómo se puede pensar que eso fue un encuentro picante, si hubo tantas fotos en ese momento y, sobre todo, en un lugar en el que estaban los familiares, amigos y padres de esta chica?».

Mientras los foros de la web ardían con la polémica acerca de la supuesta adulteración de las fotos, Berlusconi se mezcló en la polémica. «Es absurda la voluntad persistente del centroizquierda de atacar al adversario político con acusaciones falsas», se quejó.

En la fiesta, además, según algunos medios, Berlusconi le habría regalado a la joven -que dicen que llamaba «Papi» al primer ministro- un collar de oro con un brillante y ella le entregó su book, con el propósito de que aquél le allane una carrera en televisión.

Sobre las supuestas visitas anteriores de Berlusconi a Nápoles cuando Noemi era aún menor de edad, y sobre los viajes de ésta a Roma y a Milán porque «el pobre» jefe de Gobierno estaba demasiado ocupado, según la confesión de la joven, el premier no aclaró nada.

«Quiero muchísimo a mi esposa, y sobre esto no quiero agregar nada más», añadió. Con la frase, pareció confirmar especulaciones de algunos observadores, en el sentido de que podría buscar una reconciliación in extremis para no tener que ceder parte de su cuantiosa fortuna (ver aparte).

El padre de Noemi, Elio Letizia, confirmó la versión de «Il Cavaliere» y dijo a La Repubblica que «la amistad con Berlusconi se circunscribe a mí». A la vez que negó que haya una relación de su hija con el primer ministro, admitió que ésta tiene pretensiones de iniciar una carrera televisiva y que, con ese fin, le entregó su book de fotos. «Noemi persigue un sueño. ¿Por qué impedírselo?», dijo.

Por si algo faltara, Lario (53) volvió a atizar el escándalo en los medios. «Me siento como un soldadito asediado por el Ejército», comentó tras su decisión de divorciarse después de 19 años de matrimonio y casi 30 de relación.

En declaraciones al Corriere della Sera, indicó que se siente dolida por el hecho de que «amigos de toda la vida» se pasen ahora a las filas de su esposo y por los ataques que dice haber recibido y que auguran una lucha sin cuartel y sin límites.

«Quiero que todos entiendan, si todavía no lo entienden, que estoy defendiendo mi dignidad como mujer, que ha sido profundamente ofendida. Y que conmigo, estoy defendiendo la de nuestros hijos».

Según confesó a sus más íntimos, Lario confirmó que el supuesto affaire con Noemi es la causa de un divorcio multimillonario. «Es la prueba de que él no ha cambiado. Me había prometido que no volvería a las andadas y ha empeorado. Son ya diez años soportando todo esto. Ahora, la gota ha colmado el vaso, no vuelvo hacia atrás», subrayó la mujer.

Mientras, toda Italia asiste absorta a la reyerta. La Iglesia se afana en pedir recato y sobriedad a la pareja, mientras la oposición se pregunta cómo confirmar o descartar que Berlusconi haya tenido relaciones con una menor.

Agencias EFE, ANSA y El Mundo

Dejá tu comentario