* La decisión del monopolio «Clarín» de no presentarse a la licitación de APTRA para la transmisión de la ceremonia del Martín Fierro el próximo 7 de mayo no llamó la atención. Lo risueño es que recién ahora, cuando los últimos premios no lo favorecieron porque APTRA se volcó hacia «Telefé», el monopolio se enoja. La historia de los Martín Fierro está llena de desprolijidades y suspicacias, en especial porque algunos de los que votan están directa o indirectamente vinculados a los candidatos, ya sea porque son «prenseros» o porque trabajan en los medios audiovisuales que compiten. Eso fue siempre así, y siempre se dijo en esta sección. Sin embargo, mientras fue favorecido por APTRA, «Canal 13» nunca cuestionó los Martín Fierro, y «Clarín» le daba amplia cobertura, con opiniones de famosos para ensalzarlos. Casi la misma que le dio ayer para demolerlos.
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* Lo que sí se sabe oficiosamente es que algunos periodistas que pertenecen a APTRA están manteniendo conversaciones para que se produzca algún cambio en la entidad y que tenga mayor transparencia en sus decisiones y fallos. Quieren estos periodistas o bien que haya una profunda revisión de su estructura, o bien separarse y formar una entidad aparte. Esto último parece poco practicable, porque en el pasado existieron varias «alternativas» a los premios de APTRA siempre condenadas a lo efímero.
* La vuelta de Nicolás Repetto al frente del tercer año de «Sábado Bus» no ofreció casi nada nuevo. Aunque cambiaron las secciones, no sorprendieron ni se destacó ninguna en especial, salvo la anunciada con bombos y platillos por su conductor, y que no fue más que una suerte de spot publicitario protagonizado por la invitada Mariana Arias, al desnudo, y con frases escritas en su anatomía: «Escrito en el cuerpo». En cuanto a los invitados, «Canal 13» se valió de la presencia de Adrián Suar entre ellos para empezar a informar de su ruptura con APTRA, que hizo pública dos días después. Repetto, siempre sonriente, preguntó: «Adrián, ¿no te dio bronca que me hayan entregado el Martín Fierro?» a lo que Suar respondió, como es natural, que no le guardaba rencor a su amigo, pero se despachó contra el modo de calificar de APTRA y repitió que no volvería a asistir a la fiesta de entrega de los premios a la radio y la televisión.
* Una suerte de «monólogo» fue lo que ofreció Lucho Avilés, después de que Repetto indagara: «Lucho, ¿usted realmente cree que le ha hecho un bien a la televisión?» y Avilés, inmutable y convencido, aseveró que sus programas jamás habían violado los límites de la privacidad como lo hacen, según su criterio, los actuales programas de «chimentos». Ramón Palito Ortega, junto a Lucía Galán, interpretó el tema de «El sodero de mi vida». Palito habrá progresado en política, pero se nota que perdió totalmente la práctica para hacer playback: se olvidaba la letra e intentaba disimularlo dando la espalda a cámara o abrazando y ocultando su cara en el hombro de la Pimpinela.
* La bella novia de Carlos Menem, Cecilia Bolocco, hizo su esperada aparición en la telenovela «Betty, la fea». No estuvo mal como actriz. La ex miss universo actuó de ella misma y le dio una lección a Betty, quien lloraba y no encontraba consuelo por la fealdad que la aqueja. «A veces ser bella no ayuda», dijo Bolocco, rubricando así una lección de filosofía según los cánones de la televisión.
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