Avatares de la TV

Tras las sanciones del Comfer por el baile del caño, la carta de queja de la Cámara de Anunciantes y el repudio de los televidentes en encuestas, habrá que ver cuánto inciden las repercusiones para atenuar el mal gusto de la TV. La Cámara Argentina de Anunciantes se pronunció con respecto a los excesos de la telebasura y solicitó a medios, productores, agencias y anunciantes que tomen conciencia de que la buena comunicación se hace con conductas responsables.

El Comfer notificó a «Canal 13», «Canal 9» y «América» de su infracción a la ley de Radiodifusión al repetir el baile espumante que Nazarena Vélez realizó en topless el martes pasado en «Showmatch». El organismo consideró «obsceno» ese contenido y multó a «RSM», «Acoso textual», «Intrusos», «A la manera de Sofovich», «La Mañana del 9», «Los profesionales de siempre», «Duro de domar» y el programa de Marcelo Tinelli. Según el informe elaborado por los psicólogos y sociólogos que integran los equipos técnicos de evaluación del Comfer, la danza de la Vélez tuvo «un contenido obsceno» y, según la ley de Radiodifusión, «el contenido obsceno, tanto dentro como fuera del horario de protección al menor, es calificado como falta grave». El Comfer informó además que está evaluando el contenido de «Gran hermano famosos».

Para contrastar con el «deber ser», ayer la TV siguió su curso habitual con hitos tales como la encerrada de «Gran hermano famosos» Fernanda Neil, hablando con Hernán Caire sobre la cantidad de consoladores que tiene, y el intento -frustrado- de masturbarse en la casa (de «Gran hermano»). Esto tamizado con conversaciones entre Luis Vadalá y Roña Castro en contra de todos los encerrados, donde se contabiliza, como mínimo, un insulto por oración. Quienes defienden «Show-match» alegando que exhibe «al menos algo de talento en la danza para la que se ensaya toda la semana», se alegraron más esta semana con el show de Nazarena Vélez, que tuvo menos voltaje erótico en la lambada romántica. Pero Jorge Lafauci desde el jurado no tardó en quejarse porque «Yo esperaba una lambada hot pero me encontré con Heidi» a lo que Moria Casán y Gerardo Sofovich expusieron, con sensatez, que al ver a Nazarena bailar no recordaban el «Abuelito dime tu» pese a que la vedette estuviera caracterizada con peluca morocha y vestida.

En «CQC» de «Telefé» siguieron embistiendo contra Marcelo Tinelli, con menos crítica en cambio a «Gran hermano famosos» pues se emite en el mismo canal. El miércoles Mario Pergolini abrió el programa valiéndose de una estética similar a las grabaciones que emiten de forma clandestina los integrantes de la ETA. Apuntaron contra el contenido « chabacano» de «Showmatch» con la leyenda «Comando acción desengrasante». Más tarde las cucarachas se paseaban por una gran fábrica de caños y elaboraban el top five del mal gusto y la grosería. . Ayer en «Intrusos» presentaron a Noelia, la esposa de Luis Vadalá, quien se peleó en cámara con el cocinero Nino Dolce y lo trató de «cagón», tras lo que Dolce abandonó el canal con su característico despliegue teatral. La rivalidad se remonta a la mala relación entre Dolce y Vadalá dentro de la casa luego de que el cocinero acusara al ex de Moria Casán de haber participado de la dictadura.

Atípica una Andrea del Boca «mala» en «»Mujeres Asesinas», como la esposa engañada de un médico de hospital (Martín Seefeld), quien se brota ante las sospechas de infidelidad y se embarca en fuertes escenas de secuestro, tortura, mutilación y hasta incineración del supuesto objeto de deseo de su marido, encarnado magistralmente por Malena Solda. Si bien este ciclo se obsesiona cada vez más con explicar demasiado las «causas» de las conductas patológicas de estas mujeres con reiterativos flashbacks (se vio cómo el personaje de Del Boca había padecido una madre ausente y un padre abusador) valió este capítulo al menos para ver algo de buena actuación en TV. Y el público lo premió pues «Mujeres asesinas» fue lo más visto del día, tras casi un mes de no salir al aire víctima del fútbol y del caño.

En breve lanzan en «América» el programa de preguntas y respuestas «Quién sabe más que un chico de 5° grado» que contará con participantes adultos y conducción de Andrea Frigerio. Triste la apuesta a que la media de los potenciales concursantes sólo podría lucirse con un nivel de preguntas para chicos de diez años. En otro ciclo de preguntas, pero para adolescentes de 17, «El último pasajero», además de preguntar sobre historia o geografía, incursionaron en el interrogatorio que apela a la educación sexual. Guido Kazcka preguntó sobre la capa que cubre el útero o las zonas del cuerpo que reaccionan ante el contacto erótico. No hubo novedad, sabían tan poco como de historia o geografía.

Un trabajo sobre la TV actual difundido por Mora y Araujo esta semana indica que la mayor parte de los encuestados describe a la televisión con adjetivos negativos como «Malísima, horrible, desastrosa, zarpada, pervertida, desubicada, inmoral,basura, porquería y deplorable». Si bien es clásico que en encuestas el público responda que no ve aquella TV que luego devora en privado, el único modo de medir es el interrogatorio que indica que, para la mayoría de los consultados, los chicos imitan las conductas y el lenguaje de la TV. Más aún, para muchos esto repercute en problemas en la escuela. Fueron casi unánimes las opiniones a favor de evitar, en horario de protección al menor, especialmente las escenas de violencia, sexo, malas palabras, degradación de la mujer, promoción de las adicciones y discriminación.