#NiUnaMenos, un año después: qué pasó con el acta de compromiso

En junio de 2015, Mauricio Macri firmó el documento "Por la Mujer y la Igualdad". En diálogo con ámbito.com, la presidenta del Consejo Nacional de Mujeres cuenta qué se está haciendo para cumplir las consignas.

A Fabiana Túñez no le gusta pensar que su nombramiento sea una uno de los logros de la masiva movilización #NiUnaMenos, que este viernes cumple su primer aniversario. Y tiene razón. Con más de veinte años de trayectoria trabajando en cuestiones de género, Tuñez se ganó su lugar en la gestión pública, luego de que la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, la convocara para estar al frente del Consejo Nacional de Mujeres.

Pero para esta feminista que dirigió durante más de quince años la Casa del Encuentro, refugio para mujeres víctimas de maltrato, su ingreso a la gestión le otorga un nuevo rol: "ahora tengo que dar explicaciones acerca de qué se está haciendo desde el Estado".

Por eso, ámbito.com la contactó para saber en qué quedaron las consignas reclamadas hace un año, a partir de las cuales se elaboró un acta de compromiso que fue firmada por los precandidatos presidenciales de distintas fuerzas, entre ellos, el actual presidente, Mauricio Macri.

Periodista: ¿Qué prácticas concretas está llevando adelante el Estado para cumplir con las consigas del acta de compromiso de NiUnaMenos?

Fabiana Tuñez: La propuesta convocante del reclamo del año pasado se materializó en cinco consignas principales. En primer lugar está la elaboración de un plan nacional de erradicación de la violencia, también garantizar el acceso de víctimas de violencia doméstica a la Justicia, la confección de un registro oficial único de víctimas, y en cuarto y quinto lugar, educación sexual integral y protección a las víctimas de violencia, respectivamente.

P: ¿Y qué actividades se llevarán a cabo para lograr cada consigna?

F. T.: Respecto al primer punto, el Plan Nacional de Acción para la Erradicación de la Violencia de Género, que es uno de los planteos más fuertes de la protesta del año pasado, va a ser presentado en el mes de julio. Propone una mirada integral, federal, transversal e interdisciplinaria de la problemática de la violencia de género, que implica asistencia integral para mujeres en situación de violencia, de prevención, capacitación a fuerzas de seguridad, y reformas educativas en todos los niveles, desde el jardín hasta la universidad.

P.: Respecto al segundo punto, sobre garantizar el acceso de víctimas de violencia de género a la Justicia, ya hay un proyecto de ley presentado por el senador del FpV Juan Abal Medina...

F. T.: El Ministerio de Desarrollo Social está trabajando en la implementación de la ley, aprobada a fines del año pasado, que es la de patrocinio jurídico gratuito para mujeres en situación de violencia.

P.: ¿Están trabajando en la elaboración de un registro de víctimas oficial?

F. T.: Estamos trabajando en conjunto con el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) para que en 2017 haya cifras oficiales. Pero recuerdo siempre que en la página web de la línea 144 -de atención gratuita a las víctimas de violencia de género, las 24 horas, todos los días del año-, ya están disponibles desde enero las estadísticas oficiales cuantitativas y cualitativas sobre los llamados de todo el país.

Cabe recordar que ante la ausencia de datos oficiales sobre femicidios en Argentina, la Asociación Civil Casa del Encuentro realiza informes estadísticos desde el año 2008. Un año más tarde, conformó el Observatorio Marisel Zambrano, cuyo nombre recuerda a la joven asesinada a golpes por quien fuera su pareja y padre de su hija. Sólo en 2015, el Observatorio registró 286 casos de femicidio. Uno cada treinta horas.



Este año, Tuñez no asistirá a la movilización: "Ese día la línea 144 explota, con lo cual la gran

mayoría de nosotras vamos a estar atendiendo el teléfono".



P.: ¿Y cómo se piensa asistir a las mujeres que han sufrido violencia de género?

F. T.: Se van a construir, en principio, 25 hogares para mujeres en situación de violencia a lo largo y a lo ancho del país. También está contemplado el sistema de tobilleras electrónicas para agresores, que va a informar cuándo está violando la medida cautelar, y si la viola, que eso sirva como prueba suficiente para detenerlo, también se le va a avisar a una mujer a cuántos metros está el agresor.

P.: ¿Hay un seguimiento de los casos denunciados?

F. T.: La línea 144 hace un seguimiento de casos, y se mantiene un contacto con la mujer. Estamos haciendo un convenio con el 911, cuya prueba piloto será este año. Tiene que ver con que desde la misma línea podamos pedir el móvil judicial. También estamos desarrollando una aplicación para el teléfono de la mujer, para que con sacudir el teléfono se activen tres números de emergencia.

P.: ¿Y hay algún programa para contener a las familias de víctimas de femicidios?

F. T.: Tenemos una mesa permanente de familiares de víctimas de femicidios, que desde el mes de febrero se reúnen en el Consejo. Hay una especial atención hacia ellos, monitoreo y seguimiento.

P.: ¿Alcanza el presupuesto que destina el Gobierno al Consejo?

F. T.: El presupuesto que tenemos fue el que aprobaron el año pasado, cuando aún no existía este programa. Este año habrá que presentar un presupuesto que sea adecuado para el plan.

P.: Dada la dimensión que cobró en nuestro país la problemática de la violencia de género, no cree que el Consejo debería tener rango de Secretaría?

F. T.: En este momento estoy dedicada a presidir este Consejo y darle prestigio, jerarquía, el tema del rango se verá más adelante. El Consejo estaba sin jerarquía en los últimos años, la mejor gestión fue la de Virgina Franganillo, que fue su primera presidenta, y después se fue desdibujando.

P.: ¿Qué cambió después de NiUnaMenos?

F. T.: Yo creo que lo que generó la movilización del año pasado fue un claro mensaje de la sociedad acerca de que éste también era un tema de agenda y que era prioritario. Los llamados al 144 aumentaron, porque se le dio visibilidad masiva a la línea. Estamos en un promedio de 7000 llamados por mes. Todavía hoy la mujer sigue siendo vista como un objeto, una cosa. El cambio de paradigmas culturales va a llevar años, pero ya comenzó.