Para romper con el prejuicio de que comer saludable es algo sustancialmente caro, expertos revelaron cinco trucos que permiten mantener una dieta equilibrada para la salud, sin que eso impacte de forma negativa en la economía.
Cómo comer rico, saludable y barato: cinco trucos para ahorrar en tu alimentación
Especialista sugieren distintos trucos para implementar cuando se planifica el menú semanal. El objetivo es el cuidado tanto de la salud como de la economía.
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La creación de un menú semanal es clave para empezar a pensar en eso, ya que organiza las compras y evita gastos innecesarios. Es que, según aseguran desde la nutrición, la planificación adecuada permite el equilibrio. Así puede disfrutarse de una alimentación nutritiva sin pagar de más.
Además, esto permite que se pueda aprovechar la disponibilidad de los productos de temporada para diversificar la dieta, sin dejar de disfrutar de alimentos más baratos y cargados de nutrientes. Se puede disfrutar de una variedad de opciones sin aumentar los gastos.
Los cinco trucos para ahorrar y comer saludable
1. Elaboración de un menú semanal:
Para esto lo fundamental es elaborar una lista de compras basada en el menú personal de cada uno, pero a la hora de ir al supermercado, revisar las etiquetas de los productos.
A la par, es vital mantenerse flexible para poder adaptarse, tanto a las distintas ofertas, como a la disponibilidad de productos. Esto, además evita comprar alimentos innecesarios. Planificar es la base de toda dieta saludable y económica.
2. La sustitución de proteínas animales por vegetales
La inclusión de proteínas vegetales es de los más económico y saludable. Este es el caso de las legumbres, como por ejemplo, lentejas y garbanzos. Estos son productos ricos en fibra y nutrientes, y suelen ser más baratos que la proteína animal.
Por supuesto, también es importante consumir proteínas animales de calidad y proximidad para que la dieta se mantenga amplia y expansiva.
3. Aprovechar los productos de temporada:
Comprar frutas y verduras de temporada permite disfrutar de alimentos frescos y naturales a un mejor precio. Es que, debido a su alta disponibilidad, estos productos suelen ser más baratos, a la vez que ofrecen variedad en la dieta. De hecho, según indican los expertos, la mitad de la dieta debe consistir en frutas y verduras.
4. Elegir restaurantes saludables y baratos
Otra de las claves es la precaución al momento de salir a comer. Para esto, lo esencial es elegir el restaurante con la anticipación adecuada para garantizar que el mismo tenga opciones saludables y económicas. La planificación anticipada permite visualizar previamente el menú del lugar para asegurarse de que se adapte a las necesidades de cada uno. Es clave evitar las decisiones apresuradas, porque se puede caer en lugares con comida mucho menos saludable y más cara.
Además, lo aconsejable es no llegar al restaurante con hambre, ya que esto puede llevar a elegir platos más calóricos, y se recomienda compartir el primer plato, optar por el plato principal menos grasoso posible, y terminar con fruta.
5. Aprovechar las sobras
Los expertos también aconsejan que no se debe tirar la comida que sobra, sino reutilizarla complementándola con ensaladas o verduras, por ejemplo.
Esto genera que se reduzca el desperdicio de alimentos, además de que permite ahorrar en gastos, y puede llevar a ahorrar tiempo y esfuerzo si se cocina en grandes cantidades.
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