Trump amenazó con un ataque nuclear a Norcorea y advirtió que se arriesgan a la "destrucción"
-
El presidente de Corea del Sur defendió su decreto de ley marcial: "Lucharé hasta el final"
-
Trump invitó a Xi Jinping al acto de toma de posesión de la presidencia
En línea con los tuits de Trump, el jefe del Pentágono minimizó el poderío militar de Pyongyang, aseverando que "perdería cualquier carrera armamentística o conflicto que se iniciara" con Estados Unidos.
Corea del Norte dijo que está considerando planes para atacar con misiles el territorio estadounidense de Guam, horas después de que el presidente Donald Trump advirtió a Pyongyang que si vuelve a amenazar a Washington "se encontrará con un fuego y una furia que el mundo jamás ha visto".
En la noche del miércoles (jueves temprano en Corea del Norte) Pyongyang reaccionó diciendo que Trump no era un hombre razonable.
"Un diálogo sensato es imposible con un tipo así que carece de raciocinio y con él sólo funciona la fuerza absoluta", indicó el servicio oficial de noticias KCNA citando al general Kim Rak Gyom, del ejército de Corea del Norte.
Posteriormente, desde el país asiático afirmaron que tiene preparados cuatro misiles de alcance intermedio apuntando en esa dirección para lanzarlos en cuanto dé la orden el líder norcoreano, Kim Jong-un.
El ejército norcoreano "está seriamente examinando el plan" para ejecutar un "ataque envolvente" con cuatro misiles Hwasong-12 de rango intermedio contra Guam para enviar "una fuerte señal de advertencia a Estados Unidos", advirtió la agencia estatal norcoreana KCNA en un comunicado.
Este plan "se finalizará para mediados de agosto y se reportará al comandante en jefe (Kim Jong-un) de las fuerzas nucleares de la DPRK (siglas en inglés de República Democrática Popular de Corea, nombre oficial del país) para esperar a sus órdenes", afirmó el comandante de las Fuerzas Estratégicas norcoreanas, Kim Rak-Gyom.
Pyongyang mantuvo así su pulso dialéctico con Washington, después de que en la víspera la tensión entre ambos países se elevara con la amenaza por parte de Corea del Norte de atacar Guam a raíz de la advertencia lanzada por el presidente estadounidense, Donald Trump.
Estados Unidos descartó una "amenaza inminente" para ese estratégico enclave militar, donde tiene desplegados unos 6.000 soldados, u otros objetivos de ese país, confiado en que la presión diplomática prevalezca.
"Creo que los estadounidenses deben dormir bien, sin tener ninguna preocupación sobre esta particular retórica de los últimos días", dijo el jefe de la diplomacia estadounidense, Rex Tillerson, tras justificar el "mensaje fuerte" del presidente Trump "en un lenguaje que Kim Jong-un pueda comprender".
Las repercusiones de los tuits de Trump y su incendiaria andanada del martes desde su club de golf en Nueva Jersey, donde está de vacaciones, afectaron a la baja al dólar, a las principales bolsas mundiales y despertaron inquietudes.
China exhortó a evitar "las palabras y actos susceptibles" de agravar la tensión, en tanto Berlín pidió "moderación" a ambas partes. Francia, en tanto, elogió la "determinación" de Trump ante Pyongyang.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, se dijo "preocupado", y llamó a través de su portavoz a reducir las tensiones y apelar a la diplomacia.
A instancias de Washington, la Organización de las Naciones Unidas endureció días atrás las sanciones a Pyongyang por su programa nuclear, que podrían costarle al régimen norcoreano 1.000 millones de dólares anuales.
Ante trascendidos de que los comentarios de Trump habían sorprendido a su círculo más cercano, la portavoz de la Casa Blanca Sarah Huckabee Sanders dijo que el Consejo de Seguridad Nacional y otros funcionarios sabían que "el presidente iba a responder (...) con un mensaje fuerte en términos inequívocos".
La remota y paradisíaca isla de Guam, de apenas 550 km2 y donde viven 162.000 personas, en su mayoría dedicados al turismo, permanecía el miércoles en calma frente a la amenaza norcoreana. El gobernador Eddie Calvo minimizó los dichos de Pyongyang, pero señaló que el territorio está "preparado para cualquier eventualidad".
"No es que haya algo que podamos hacer de todos modos, esta es una isla pequeña, no hay para dónde correr", dijo el residente James Cruz a la AFP, desde la capital Agaña.
La retórica de Trump ha ido en aumento con Pyongyang tras conocerse dos pruebas exitosas de misiles balísticos intercontinentales (ICBM) por parte del régimen de Kim.
La primera prueba, que Kim describió como un regalo a los "bastardos estadounidenses", mostró que el dispositivo podía alcanzar Alaska. La segunda sugirió que podría incluso llegar a Nueva York.
Dejá tu comentario