Cabify presentó su fundación con foco en la descarbonización y apuesta al desarrollo en Argentina

"Argentina es un caso de éxito", según David Pérez, SVP de Stakeholders de Cabify, quien dialogó con Ámbito sobre los proyectos de la empresa en el país y la propuesta que encaran desde la fundación que presentaron en la región hace unos días.

Cabify es una aplicación de movilidad modelo en toda Latinoamérica y España. 

Cabify es una empresa que es modelo en movilidad en el mundo y tiene un fuerte compromiso de desarrollo en España y Latinoamérica. David Pérez, SVP de Stakeholders de Cabify, visitó Argentina y otros países de la región con el fin de presentar Fundación Cabify, la institución que busca impulsar el cambio en los espacios urbanos y mejorar la forma de habitar las ciudades y proteger el entorno.

En diálogo con Ámbito, indicó que “la fundación nació hace unos años y tiene como objetivo el desarrollo de grandes espacios naturales para contribuir a combatir el problema del calentamiento global”. Asimismo, en el marco de su “gira” por distintos mercados de la región, habló con este medio sobre el desarrollo de la empresa de movilidad de origen español en Argentina.

Destacó que este país es visto como “caso de éxito” dentro de Cabify por su rápido crecimiento de 2018 a la fecha y explicó las razones que explican esta dinámica, según su visión. Anticipó cuáles son las expectativas de crecimiento y algunos de los próximos proyectos que tienen por delante. Y, por otro lado, comentó los planes que tienen desde la fundación en materia de descarbonización, género e inclusión.

Periodista: Vino a Argentina a presentar la Fundación Cabify, ¿qué objetivos tienen con esta iniciativa y cómo vienen trabajando con esta institución?

David Pérez: Estamos trabajando en varios proyectos de repoblación de plantaciones nativas locales en terrenos determinados en las distintas ciudades en las que operamos. Ya tenemos unos cinco iniciativas al día de hoy: uno en España y el resto en varios centros urbanos de Latinoamérica. Es un programa bastante innovador. Y lo que queremos es, de la mano de las autoridades municipales locales, transformar espacios para que estén poblados de árboles. El objetivo es que estos sirvan para que haya conciencia sobre hacia dónde deben ir las ciudades del futuro. De hecho, varias de las más avanzadas del mundo están evolucionando en ese sentido.

Por otro lado, en 2018, desde Cabify decidimos ser la primera empresa de movilidad carbono neutral y estamos avanzando en un proceso de descarbonización en la Fundación. La expectativa es que en 2025 todos los vehículos que trabajen con nosotros sean descarbonizados en España y en Latinoamérica venimos un poco más lento, pero la idea es lograr ese objetivo para 2030. El usuario ya muestra una fuerte preferencia por los vehículos descarbonizados. En algunos mercados, pueden pedir autos con la etiqueta eco sin costo adicional y estamos viendo cambios en ese sentido en la conciencia del cliente.

La otra iniciativa que tenemos es poner el foco en género e inclusión. El proyecto en ese sentido comenzó en Mendoza, con el proyecto Cabify Mujeres y apunta a tener más conductoras. En 2018 hicimos un estudio que nos reveló que la mayoría de nuestros conductores eran hombres y queremos que ellas tengan las condiciones de seguridad necesarias para sumarse a nuestra plataforma e incrementar su participación. Hemos tenido muy buena aceptación.

David Pérez Piñeiro, Senior VP of Stakeholder Relations de Cabify.

P: ¿Qué mercados visitó en este viaje y cómo ve a la Argentina dentro del plan de negocios de Cabify?

D.P.: Yo tengo un rol global en Cabify, que es una empresa iberoamericana, de origen español. Entonces, visito mínimo una vez al año todos los mercados. Estuve en Chile, en Perú y, ahora, en Argentina, que es un caso de éxito para mí. Cuando entré, alrededor de 2018, era un país muy chiquito como mercado y habíamos crecido mucho en otros, como México y Perú, pero de ese momento a la fecha, ha tenido una evolución enorme.

Hoy, es el país más grande y el mercado en el que hacemos más viajes. Es un modelo a seguir y el reflejo de lo importante que es cuidar la calidad, la formalización de un país, los procesos que tenemos de selección de drivers. Vamos conformando un colectivo profesional de conductores. Ahora, muchos de los ojos miran a Argentina dentro de Cabify, siguen qué se está haciendo aquí, cómo está trabajando el equipo y cómo son capaces de abrir nuevas ciudades y que funcionen bien.

P: ¿Qué nuevas ciudades abrieron y qué proyectos tienen?

D.P.: El año pasado, en diciembre, abrimos Mar del Plata y realmente ha sido todo un éxito. En el primer mes, los resultados de esa ciudad superaban los de otras grandes, como Quito y Guayaquil. Creemos que es clave que el hecho de tener un grupo fuerte de socios conductores. Porque, uno tiende a creer que el cliente final es el secreto de toda empresa, pero en nuestro caso, el pool de conductores es un elemento importante también. Por eso, cuidamos mucho los detalles en el proceso de selección. Ellos ya confían en la marca y eso hace que el cliente tenga un mejor servicio. También en la selección de vehículos y en frecuencia de viajes ponemos un fuerte foco.

Buenos Aires es la ciudad más importante para nosotros en materia de movilidad en el país, pero también estamos en las del interior grandes, como Córdoba, Mendoza, Corrientes, Tucumán y Rosario. Esta semana estamos abriendo Bariloche. Somos una marca conocida en el país y esto nos ayuda, pero también vamos creciendo en anillos concéntricos en las ciudades en las que ya estamos. Y tenemos un aliado importante en todo este desarrollo que el Banco Interamericano de Desarrollo. Hay varios proyectos que hacemos con ellos para convertirnos en una alternativa real al transporte público en las ciudades.

P.: ¿Qué diferenciales tienen respecto de la competencia?

D.P.: Tenemos un modelo que nos diferencia de nuestra competencia. Desde el hecho de que creamos una sociedad local, que generamos facturas en todos los viajes y contribuimos a la generación de empleo en los países en los que operamos. La formalidad es un hecho bien visto por los conductores y pasajeros. De hecho, nosotros tenemos un grupo de trabajo muy nutrido en el país con 100 personas que trabaja en el desarrollo de negocio local.

El proceso de habilitación de una ciudad es todo un trabajo. Hay que garantizar un parque interesante de conductores. Hacemos un trabajo previo de convocatoria, con un proceso de selección en la zona. No podemos tener pocos autos disponibles porque si no los plazos de espera se hacen muy largos.

P.: ¿Cómo es el canal de comunicación con el conductor?

D.P.: Hay un salto cualitativo en pedir un vehículo por una aplicación respecto de tomar un auto en la calle y es que permite repetir experiencias, por lo que la preocupación del conductor porque su pasajero tenga una buena experiencia es mucho mayor. De hecho, aquellos que no están bien valorados no trabajan más con nosotros, pero lo mismo aplicamos ahora para los pasajeros. Si hay un conductor que realiza una crítica negativa de un viajero, se le da de baja. Todo eso genera relaciones de confianza a futuro que son clave para nosotros.

D.P.: ¿Cómo ven el desarrollo del negocio de movilidad en el mundo a futuro?

P.: El uso de alternativas de movilidad como la nuestra crece cada vez más a nivel global y hoy representan entre el 4% y 5% del total. Hay una tendencia al crecimiento en las alternativas y nuestro real competidor es el coche particular. Por ejemplo, en Madrid, alrededor de 1,5 millón de personas entran y salen con sus vehículos de la ciudad todos los días y ocupan el espacio público. Es un modelo que creemos que está caduco y vemos una tendencia de crecimiento en los últimos años de nuevas propuestas, también está relacionada con la necesidad de garantizar alternativas. Hay un crecimiento natural dentro de los países en los que ya estamos. Un proyecto que tenemos a futuro es el desarrollo de una capa de transporte público que sea complementaria a nuestro servicio.