4 de agosto 2025 - 17:01

Inversiones en Argentina: claves para proteger el capital y administrar el riesgo

La desactivación de las Letras de Financiamiento del Tesoro (LEFIs) modificó silenciosamente el funcionamiento del mercado de pesos, lo que implica un desafío operativo.

Invertir en pesos exige asumir una responsabilidad mayor: comprender los fundamentos macroeconómicos, leer las señales del mercado y aplicar criterio técnico. 

Invertir en pesos exige asumir una responsabilidad mayor: comprender los fundamentos macroeconómicos, leer las señales del mercado y aplicar criterio técnico. 

La reciente desactivación de las Letras de Financiamiento del Tesoro (LEFIs) modificó silenciosamente el funcionamiento del mercado de pesos. Se trató de una decisión técnica, sí, pero con consecuencias estructurales. El Tesoro dejó de marcar una tasa explícita de referencia y pasó a regular el sistema a través de agregados monetarios. Esto transformó el escenario: el precio del dinero en Argentina volvió a construirse a partir del comportamiento de los agentes, no de señales fijadas desde arriba.

En este nuevo contexto, la tasa de política perdió su función tradicional y el mercado quedó a merced de referencias más volátiles, como la tasa de caución diaria. Esta tasa —que refleja el costo de prestarse fondos a un día— puede variar significativamente en cortos períodos de tiempo, y eso implica un desafío operativo, especialmente para quienes buscan capturar rendimiento sin asumir riesgos excesivos.

Claves para construir una cartera equilibraba

Pero lo más relevante no está solo en la coyuntura. Lo verdaderamente transformador es el cambio de lógica que esto impone en quienes toman decisiones de inversión. Ya no alcanza con “seguir la tasa”: ahora se necesita construir una estrategia.

Este escenario está incentivando consultas cada vez más sofisticadas. Inversores institucionales y empresas comienzan a pensar en carteras que articulen duración, liquidez y sensibilidad a expectativas. El mercado en pesos dejó de ser un espacio estático: hoy exige interpretación. Y ese es un cambio cultural, no solo técnico.

La curva de rendimientos actual muestra tasas reales positivas. Letras Capitalizables (LECAPs) de corto plazo rinden por encima de la inflación proyectada. Esto habilita un nuevo enfoque: invertir en pesos ya no es solo una forma de resguardarse del dólar o del IPC, sino una herramienta para capturar valor si se gestiona adecuadamente el riesgo.

inflacion salarios consumo
Las Letras Capitalizables de corto plazo rinden por encima de la inflación proyectada.

Las Letras Capitalizables de corto plazo rinden por encima de la inflación proyectada.

La clave está en el diseño. Para perfiles conservadores, el tramo corto de la curva sigue ofreciendo tasas atractivas con duración acotada. Para quienes pueden asumir más riesgo, aparecen oportunidades en esquemas más balanceados: una estrategia "barbell", por ejemplo, que combine instrumentos de muy corto plazo con bonos más largos vinculados a dólar o inflación, permite diversificar el riesgo y aprovechar convexidades.

Lo que se empieza a consolidar es una visión más profesional sobre la inversión en moneda local. Durante años, la lógica defensiva dominó la escena: cubrirse frente a la inflación, “ganarle” al tipo de cambio, buscar refugio. Hoy, ese reflejo debe ceder paso a una planificación más fina. El desafío ya no es solo protegerse, sino optimizar. Esto implica, por ejemplo, analizar qué tan líquida debe ser una cartera según el tipo de inversor, considerar el horizonte temporal del flujo de fondos, y definir qué función cumple cada activo: cobertura, reserva de valor, capitalización o financiamiento operativo.

En definitiva, invertir en pesos exige asumir una responsabilidad mayor: comprender los fundamentos macroeconómicos, leer las señales del mercado y aplicar criterio técnico. No hay un único camino, pero sí hay una exigencia común: pensar antes de actuar.

Ese es el valor que podemos aportar desde el asesoramiento financiero profesional. No para decidir por el cliente, sino para ayudarlo a decidir mejor. Porque en un entorno donde las tasas ya no están dictadas desde un podio, el diferencial está en la estrategia.

Dejá tu comentario

Te puede interesar