Cristina participa del último adiós a Chávez

Difícilmente la presidente Cristina de Kirchner no haya dejado de asociar la larga caravana de venezolanos acompañando al presidente Hugo Chávez rumbo a la Academia Militar, con la gente que un 27 de octubre hace ya más dos años se agolpó en las calles para tributar sus respetos al automóvil que llevaba a Néstor Kirchner rumbo al Aeroparque.

La diferencia es que en Caracas el sol acompañó durante siete horas a la procesión del pueblo venezolano; en tanto que en Buenos Aires, a pesar de que la lluvia arreciaba, la gente acompañó el último camino que recorrió el expresidente.

Cristina no disimuló la enorme tristeza que le provoca la pérdida de un "gran amigo personal y de la Argentina". Apenas llegó a Caracas se puso en contacto con los familiares y estuvo en el Hotel Tamanaco hasta las 16, hora en que partió rumbo a la Academia Militar.

En el camino se asombró de los ríos de venezolanos que tributaban sus respetos a Chávez, algunos llorando, otros vivándolo, otros cantando, de miles de maneras el pueblo estuvo presente para acompañar a su líder y también al vicepresidente, Nicolás Maduro.

Un elemento en común, más allá de la tristeza, es la convicción de los venezolanos de que la revolución que inició Chávez continuará.

Las muestras de afecto del pueblo fueron lo que llevaron a que los 8 kilómetros que hay entre el Hospital Militar y la Academia Militar demandaran 7 horas en ser recorridos. Maduro acompañado del mandatario boliviano, Evo Morales, no abandonaron ni un minuto la caravana.

Recién cerca de las 19 horas el féretro del líder bolivariano llegó a la "Casa de los Sueños Azules" como el gobierno llama al Hall de la Academia Militar. En el Salón del Libertador Simón Bolívar se dispuso la Capilla Ardiente.

La Presidente Cristina de Kirchner acompañó el ingreso del féretro desde el Hall hacia la Capilla Ardiente. Luego se sentó entre su hermana, la médica Giselle Fernández, y la senadora y esposa del presidente de Uruguay, Lucia Topolansky.

Los presidentes de Argentina, Uruguay y Bolivia constituyeron la primera guardia de honor que consistió en situarse al lado del féretro mientras se entonaba el himno venezolano.

En segundo lugar fue la guardia de honor de Nicolas Maduro y funcionarios, en tanto la tercera y la cuarta fueron encabezadas por la familia. En primer lugar los hijos y luego los hermanos y su madre.

La capilla Ardiente permanecerá hasta el viernes a las 10 de la mañana donde luego de llevarse a cabo un servicio religioso con la presencia de los familiares, mandatarios extranjeros y autoridades del gobierno el féretro será trasladado para su entierro. 

Según informó el canciller venezolano, Elías Jaua, se espera la llegada de diez mandatarios para participar de la ceremonia, incluido el presidente de México, Enrique Peña Nieto.

Se descuenta que concurrirán a Venezuela numerosos mandatarios Latinoamericanos, como Rafael Correa de Ecuador, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, el mandatario colombiano, Juan Manuel Santos de Colombia; Dilma Rouseff de Brasil, entre otros. Existen bastante dudas de que el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, quién calificó a Chávez de "símbolo y orgullo de todos los luchadores y revolucionarios de América Latina" pueda llegar a participar de las exequias.

Cabe recordar que temprano por la mañana, la jefa de Estado aterrizó en la capital venezolana junto a la comitiva oficial y acompañada por el presidente de Uruguay José Pepe Mujica. Luego se dirigió al Hotel Tamanaco.

Otro de los mandatarios que esta desde la noche del martes es Evo Morales, quién viajó luego de hacer un llamado a que "este proceso de liberación, no solamente del pueblo venezolano sino del pueblo latinoamericano, debe continuar".

Cristina, quién está visiblemente afectada por la muerte de "su amigo Hugo Chávez" permanecerá en Caracas hasta el viernes a la mañana para participar junto a todos los mandatarios y personalidades del extranjeros de la ceremonia oficial, estimándose su retorno recién hacia la noche.

El Gobierno argentino considera importante estar al lado de Nicolás Maduro junto con otros presidentes de la región como una muestra de respaldo al gobierno venezolano donde se teme que ante la ausencia del líder la oposición pueda llegar a debilitar el gobierno de transición hasta las elecciones convocadas para dentro de un mes.

"Hay una mezcla de angustia por un lado y por otro lado que esto tiene que continuar, apoyándolo al vicepresidente Nicolás Maduro", señaló Cheppi, quien dijo que en Caracas se vive una situación "similar" a la que se registró en la Argentina cuando falleció el ex presidente Néstor Kirchner.

Cabe recordar que una vez conocida la noticia, la presidente Cristina de Kirchner decidió suspender toda su actividad oficial, esto incluyó el encuentro bilateral que iba a mantener con su par de Brasil en la localidad de Calafate.

La delegación argentina estuvo integrada por los ministros Héctor Timerman (Relaciones Exteriores), y Julio De Vido (Planificación Federal); y los secretarios Carlos Zannini (Legal y Técnica) y Alfredo Scoccimarro (Comunicación Pública). También viajaron a bordo del avión presidencial el titular de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez; el jefe de la bancada de senadores oficialistas, Miguel Ángel Pichetto; el diputado Andrés "Cuervo" Larroque y el legislador porteño Juan Cabandié, entre otros.