11 de mayo 2025 - 00:00

Cuatro gobernadores defienden el pago chico y recta final en CABA con el cisne negro de Ficha Limpia

Elecciones en Salta, Jujuy, San Luis y Chaco. El destacado, el test chaqueño, con Zdero (más LLA) vs Capitanich. Armados provinciales que se esfumarán para octubre. PJs divididos, libertarios y "liberblues". La responsabilidad de Milei en la caída de Ficha Limpia le da un giro a la campaña porteña.

Salta, Jujuy, San Luis y Chaco tendrán contiendas locales. 

Salta, Jujuy, San Luis y Chaco tendrán contiendas locales. 

Este domingo cuatro distritos irán a las urnas, en una acelerada del calendario electoral que tuvo su punto de largada el mes pasado en Santa Fe. Salta, Jujuy, San Luis y Chaco tendrán contiendas locales. Una previa de la elección más “nacionalizable” de este primer tramo de comicios desdoblados: las elecciones porteñas, que tuvieron esta semana un punto de inflexión en la campaña, tras la caída del proyecto Ficha Limpia en el Congreso Nacional.

En tres de las batallas de este domingo, en Salta, Jujuy y San Luis, prima una lógica local, con armados de los gobernadores pensados en el pago chico, con transversalidad ideológica y partidaria. El salteño Gustavo Sáenz y el puntano Claudio Poggi buscarán sostener la hegemonía local con frentes provincialistas, que seguramente se desdibujarán para octubre. En ambos distritos creen que los mandatarios serán prescindentes para las nacionales, ya que sus armados contienen a dirigentes de todas las tribus.

El jujeño Carlos Sadir, en tanto, se volvió a unir al PRO y se esperanza en la fragmentación opositora para sostener una gestión del radicalismo que, en la continuidad de Gerardo Morales, empieza a mostrar signos de desgaste.

Por eso, de las cuatro contiendas del domingo, la de Chaco es la que contiene más condimentos para mirar como un ensayo hacia octubre. En primer lugar, porque el gobernador Leandro Zdero, también radical, impulsó una sociedad con La Libertad Avanza; un hecho que hasta ahora no intentó ninguno de sus pares dialoguistas, pero que podrán imitar si la alquimia resulta. Por un lado, a los libertarios no los desvelan las lecciones provinciales.

elecciones 2025.jpg
Un nuevo round electoral este domingo: el Gobierno, ante otra prueba en las urnas.

Un nuevo round electoral este domingo: el Gobierno, ante otra prueba en las urnas.

Por otro, no tienen candidatos fuertes en el territorio. Los gobernadores no peronistas, en tanto, saben que comparten electorado con Milei, y que una boleta violeta en el cuarto oscuro solo les parte el voto. Lo vivió incluso Maximiliano Pullaro en Santa Fe, donde si bien ganó, lo hizo por un menor porcentaje que en 2023: esas adhesiones (que tampoco son tantas) saltaron a LLA. Los libertarios, acostumbrados a forzar los hechos para el lado que les conviene, podrán mostrar una victoria el domingo a la noche, aunque no dirán que fueron actores de segundo orden. El escenario chaqueño tendrá un segundo round en octubre, cuando se dispute la renovación de senadores nacionales.

En esa provincia se dará otra particularidad: así como en CABA, que votará una semana después, hay una fragmentación con 17 listas, con socios naturales que se dividieron para medir fuerzas -acaso para volver a unirse más adelante, ya con la etiqueta del precio-, en Chaco se dio el caso opuesto. Una compulsa polarizada entre esa alianza UCR-LLA (que incluye también al PRO) y el peronismo, que logró la unidad encabezada por el exmandatario Jorge Capitanich.

El PJ está intervenido en Salta y Jujuy. En el primer distrito, buena parte de los dirigentes están dentro del armado provincial de Sáenz, cuestionado por Cristina Kirchner por colaborar con Milei en el Congreso. En el segundo caso, surgieron dos listas que no responden a la intervención: la más importante, la de la senadora nacional Carolina Moisés, que creó el frente Somos Más. En San Luis el PJ también va dividido, pero con hegemonía del frente de Alberto Rodríguez Saá, que intentará recuperar protagonismo. Su hermano Adolfo volvió a plegarse a Poggi, como en 2023. No se suturó la pelea de los hermanos que dominaron la política puntana desde el retorno de la democracia.

El nuevo actor que emerge este año, LLA, no participará oficialmente en San Luis, aunque hay dirigentes que se arrogan la representación de Milei en el distrito. Pero, lo cierto, es que no tienen la venia de la Casa Rosada. En tanto, en Jujuy así como en Salta aparecerá la lista violeta en el cuarto oscuro. Hay una coincidencia, aparecen nóminas “liberblue” para partirles el voto: dos en Jujuy y una en Salta, con episodios en la Justicia respecto al uso de colores, de nombres y de leones. El “efecto Marra” que se propagará en cada comicio.

Recta final en la Ciudad de Buenos Aires

Tanto en la Casa Rosada como en los cuarteles generales del peronismo y del PRO, la mayor atención está puesta en el 18 de mayo, día en que se llevarán a cabo las elecciones porteñas. Ya se sobreanalizó: la excesiva fragmentación, en especial entre libertarios y los exsocios de Juntos por el Cambio, le dan la chance al peronismo, unido bajo la candidatura de Leandro Santoro, de terminar primero en el tablero sin subir el histórico caudal de votos del PJ en la Ciudad, que oscila entre el 25% y el 30%.

Por eso, el vocero Manuel Adorni apostó por la nacionalización con el símbolo de la motosierra, primero; y por la polarización con el “kirchnerismo” (más imaginario que real en CABA), después. Las últimas encuestas empezaban a mostrar un despegue del vocero en el segundo lugar, con un estancamiento de Silvia Lospennato, del PRO. Un efecto de la aparición de Javier Milei en la campaña, que levantó al vocero, quien pese a ser una figura central del Gobierno no terminaba de seducir a los porteños. Con Milei ahora como cara visible, Adorni empezó a atraer la buena imagen del Presidente, que hasta allí no le correspondía.

Sin embargo, hubo un cisne negro en la campaña: el rechazo de Ficha Limpia en el Senado. Las miradas apuntan a una jugada maestra orquestada desde la Casa Rosada, que habría logrado revertir el voto de los senadores misioneros Carlos Arce y Sonia Rojas Decut, una jugada a dos bandas: mantener a Cristina en cancha para octubre a los fines de polarizar la campaña nacional y no darle una victoria a Silvia Lospennato a diez días de las elecciones porteñas.

Desde ya, Unión por la Patria también es un ganador de la caída del proyecto, ya que podrá tener a la expresidenta como candidata en octubre. Sin embargo, las culpas parecen recaer en LLA, y por ende en Milei. No habrá pruebas, jamás, pero como Ficha Limpia es una suerte de Elige tu propia aventura, los dichos del jefe del oficialismo misionero, Carlos Rovira, admitiendo que el cambio del voto de sus senadores fue negociado con el partido de Milei, hace que sea más plausible inclinarse por esa opción.

Si la historia sigue por esas páginas, como marca el libro, lo que viene es indescifrable. Quizás Lospennato no pueda mostrar esa victoria del proyecto que milita desde 2016, pero sí tener otras apropiaciones simbólicas. ¿Logrará LLA sostenerse la bandera anti-casta? Parece que el partido de Milei tiene inmunidad y en general no paga grandes costos, pero el PRO intentará en esta semana levantar esos estandartes que hasta ahora parecían exclusividad de Milei, y que fueron su principal atractivo electoral en 2023. Que luego haya sumado a la casta a la gestión y haya utilizado (y hasta profundizado) sus métodos, no tuvo mayor impacto en este tiempo.

Quizás, se abra una nueva etapa. Serán días de más Milei y de más Macri poniéndose al hombro las campañas de sus pupilos. Una pelea por la subsistencia para el PRO. Y, para LLA, un intento de asalto al principal bastión amarillo.

Dejá tu comentario

Te puede interesar